El Colegio de Veterinarios de Las Palmas impulsa la gestión de las colonias felinas que depredan sobre la fauna autóctona de Gran Canaria

La Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria ha otorgado al Colegio de Veterinarios de Las Palmas una subvención de 50.000 euros para la ejecución del Programa de Gestión de Colonias Felinas Urbanas durante el presente año, que se extenderá desde el 1 de marzo hasta el 31 de diciembre de 2021. Entre los objetivos del proyecto se encuentra instar a que todos los municipios de Gran Canaria modifiquen sus ordenanzas municipales para permitir el control de las colonias felinas, explican los veterinarios en una nota de prensa.

El Programa de Gestión de Colonias Felinas Urbanas permitirá al Colegio de Veterinarios de Las Palmas, en colaboración con los 21 ayuntamientos de la isla, prestar asesoramiento técnico a los consistorios para elaborar nuevas ordenanzas, actualizar el censo actual de las colonias felinas ubicadas en todos los núcleos urbanos de la isla, hacer campañas divulgativas en redes sociales, confeccionar material divulgativo, realizar esterilizaciones masivas en colaboración con las clínicas veterinarias y programar tres seminarios formativos para voluntarios de colonias felinas.

El Colegio de Veterinarios de Las Palmas aseguran en el escrito que los gatos asilvestrados suponen un importante impacto sobre la fauna autóctona. La proliferación de gatos en los entornos urbanos y, muy especialmente, en los rurales, supone una presión insostenible para la fauna insular ya que conviven con especies autóctonas de aves y reptiles sobre las que depredan, aseguran.

El método CES (Captura – Esterilización – Suelta) implica atrapar a todos o a la mayoría de los gatos de una colonia, esterilizarlos y devolverlos a su territorio marcados con un corte en la oreja para identificarlos como estériles. Todos los gatos son censados y registrados en una base de datos para su seguimiento individual.

A estos animales se les provee de alimento y agua diariamente, así como de refugios que les protejan de las inclemencias del tiempo. Asimismo se les facilitan tratamientos veterinarios, se les desparasita y administran los medicamentos que precisen. Los gatos suficientemente jóvenes para que socialicen y los gatos adultos amistosos se ofrecen en adopción.

Este método de trabajo precisa de un importante grado de coordinación y participación entre todos los actores implicados: ayuntamientos, técnicos municipales, veterinario municipal, policía local, alimentadores, protectoras, centros veterinarios y vecinos del municipio, entre otros.

El objetivo final es que una buena gestión de las colonias urbanas que incluya un buen plan de adopciones permita lograr con el paso de los años que ningún gato malviva en las calles, mejorando así su bienestar, subrayan los veterinarios.