La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife condena a cuatro años de cárcel por dos delitos de homicidio imprudente al patrón de un cayuco que llegó a El Hierro con 51 personas a bordo, dos de ellas muertos.
El condenado es Paul O.A. patrón de un cayuco que arribó a las costas herreñas el 1 de diciembre de 2007, después de siete días de viaje desde Noadibou (Mauritania). Según se desprende de la sentencia dictada por el tribunal presidido por el juez José Félix Mota Bello, el acusado es natural de Ghana y no le constan antecedentes penales.
Salió de Mauritania el 23 de noviembre de 2007 al mando de un cayuco con 51 personas a bordo por encargo de tres traficantes, después de que otros tres patrones abandonaran la idea de viajar, ya que la embarcación no reunía las condiciones mínimas y, sobre todo, no disponía de timón o caña.
A pesar del riesgo del viaje, con la finalidad de introducir inmigrantes ilegales en España, y poniendo en peligro la vida de éstos, decidió partir, manifestando que el timón no hacía falta y que él podía hacer la travesía sólo con el motor, que él sabía cómo utilizar la brújula y el GPS y que conocía los códigos. Según el fallo del tribunal, a los pocos días de salir de Mauritania, se acabaron el agua y la comida, circunstancia prevista por el acusado. Como consecuencia durante la travesía murieron dos ocupantes.
Al quinto día, cuando el acusado admitió que estaban perdidos, se encontraron con dos veleros a 300 millas de El Hierro, que les proporcionaron agua y solicitaron ayuda. Todos los inmigrantes fueron trasladados a bordo del barco pesquero 'Pinillos' que intentó remolcar el cayuco en el que se hallaban los dos cadáveres, pero la frágil embarcación terminó anegándose con agua y se hundió en el mar.
El acusado se encuentra en prisión provisional por esta causa desde el 4 de diciembre de 2007.