La empresa Hormigones y Construcciones Arrecife (Hormiconsa) ha planteado alegaciones al Plan General de Ordenación (PGO) en las que pretende que se le recalifiquen más de 97.000 metros cuadrados en la zona de Maneje, donde ha montado una industria desde la década de los 80 del pasado siglo, a pesar de que los terrenos estaban calificados como suelo rústico e incluso de especial protección.
La empresa reconoce que desde 1988 ejerce en esos terrenos actividades de fabricación de materiales de construcción y hormigón, y dice que se trata de “una industria consolidada que genera importantes beneficios a la economía insular”.
El Cabildo de Lanzarote denegó en 2009 las calificaciones territoriales necesarias para actividades en suelo rústico y la Audiencia Provincial ratificó hace unos meses la condena al administrador de la constructora, Miguel Morales, de un año y ocho meses de prisión por un delito contra la ordenación del territorio, ordenando el derribo de tres naves por carecer de licencia de obras.
En sus alegaciones al Plan General, la constructora llega a decir que “se vio obligada a ampliar y modernizar sus instalaciones” en suelo rústico para “poder ser competitiva y dar respuesta a una creciente cartera de clientes de un mercado emergente en constante crecimiento”.
Puedes continuar leyendo esta información en el siguiente enlace