El padre de Ruth y José niega “totalmente” que planease la desaparición de sus dos hijos con un mes de antelación
CÓRDOBA, 9 (EUROPA PRESS)
El abogado de José Bretón, el padre de los dos niños desaparecidos en Córdoba hace siete meses, considera que el auto de procesamiento dictado por el juez del caso este lunes tiene “comentarios dudosos, está basado en suposiciones” y, a su juicio, “las acusaciones tan fuertes que se dicen en el auto tienen que ser demostradas y hasta ahora hay muchas que no pueden ser demostradas ni demostrables”.
En declaraciones a los periodistas tras visitar a su cliente en el Centro Penitenciario de Alcolea, el letrado ha subrayado que “las acusaciones tanto públicas como privadas se tendrán que demostrar en el juicio”, motivo por el que sostiene que el auto está cogido con alfileres, al tiempo que informa que Bretón declarará ante el juez el próximo 25 de mayo para aclarar aspectos de la investigación, en la que será su cuarta comparecencia.
En concreto, el auto, publicado en parte por la prensa provincial, relata que Bretón estuvo cerca de un mes “noches enteras estudiando y dando cumplimiento a su plan preconcebido, mientras que, a la vez, analizaba las distintas posibilidades de actuación a las que podría tener que hacer frente”, algo que Bretón, según relata su abogado, niega “totalmente” que hiciese para planear la desaparición de sus hijos.
Al respecto, el padre admite que “estuvo muchas veces en la finca, la mayoría de ellas acompañado de sus padres, y las que estuvo solo estaba haciendo labores agrícolas de riego de los naranjos”, tal y como manifiesta el letrado, quien igualmente destaca que Bretón niega que por la noche estuviera en la finca días antes, como recoge el auto.
En cuanto a la participación de otra persona en el caso la mañana de autos, el 8 de octubre, y que se apunta en el mismo auto, Sánchez de Puerta subraya que “habrá que demostrar si existe esa persona”, de modo que “mientras no aparezca no tiene valor” y se pregunta “¿cómo es posible que esto se pueda poner en un auto de procesamiento?”. Además, niega que estuviera en la finca de la familia paterna en Las Quemadillas la mañana del día en el que Bretón denunció la supuesta desaparición de los niños en el Parque Cruz Conde, y que saliera de la casa de su hermana Catalina.
LA POLICÍA “ESTÁ DESVIRTUANDO LOS HECHOS”
Por otra parte, Bretón, según su defensa, niega “totalmente” que hablara con un amigo policía sobre las medidas de seguridad en la Ciudad de los Niños, colindante al Parque Cruz Conde, como señala el auto. Al hilo de ello, Sánchez de Puerta pone “muy en tela de juicio que se hayan efectuado muchas conversaciones entre José y la policía que constan en las actuaciones”, y con las que no está de acuerdo el letrado y “así lo demostraré en el juicio”, tal y como indica el abogado, quien admite que será su problema “demostrar que la policía está desvirtuando unos hechos”, que, a su juicio, “está narrando taxativamente en perjuicio de Bretón intentando dar una imagen de Bretón que no se atiene a la realidad”.
El auto también señala que el padre de Ruth y José llegó a realizar “un experimento con sus sobrinos sobre cuál sería la actitud de dos niños a quienes se dejara solos durante un determinado espacio de tiempo”. Al respecto, Bretón niega este hecho, aunque “sí admite que hubo un episodio en el que lleva a los sobrinos al colegio y a uno de ellos se le olvidaron unas gafas, lo dejó sentado junto a una señora, que también llevaba a los niños al colegio y que la conocía, y fue a recoger las gafas” a la casa de su hermana y “no tardó ni un minuto”.
En relación a que la abuela paterna de los pequeños supuestamente mienta en sus declaraciones, Sánchez de Puerta defiende que “Antonia es otra víctima más y ha contado única y exclusivamente lo que sabe”, por tanto “que intente ayudar a su hijo, lo considero muy humano y normal”, según comenta el letrado, quien está “seguro de que han contado lo que saben”. Además, asegura que la familia de Bretón no va a entrar en “más polémicas” con las acusaciones de la familia materna y “cuando termine todo esto ya se verá”.
A JUICIO POR LA SUPUESTA AGRESIÓN A SU HIJO Y FIANZA
Por otra parte, el juez José Luis Rodríguez Lainz en el auto pide que se enjuicie la supuesta agresión física de Bretón a José, el hijo pequeño de dos años, aunque en el momento de los hechos contaba con menos edad, tal y como narraron la semana pasada ante el juez amigos de la familia. Lainz también requiere a Bretón que preste fianza de 478.800 euros para garantizar las responsabilidades pecuniarias que deriven del caso de los niños.
A tal efecto, el abogado de la defensa, que admitió que el padre le dio “una guantada”, no considera que sea maltrato al menor, “en todo caso será una falta”, y añade que “con todos los problemas tan gordos que tiene encima, una falta por malos tratos, que no considero que sean malos tratos, no tendrá mucha importancia” en el caso.
Mientras tanto, el padre, interno en la cárcel desde el 21 de octubre y al que el juez procesa por la presunta comisión de dos delitos de detención ilegal, en la modalidad cualificada de menores y con la agravante de parentesco, y por simulación de delito, “no le tiene odio” a su mujer, Ruth, “lo único que quiere es olvidarla”, como apunta su abogado, quien relata que “los primeros días sí tuvo un resquemor con ella, pero a día de hoy no le tiene rencor”.
Además, “piensa que los niños están vivos y tiene la esperanza de que aparezcan”, a lo que añade el letrado que “no hay ningún hecho que le lleva a pensar que Bretón ha participado en la desaparición de los niños”, por lo que “mantiene su inocencia”, según apostilla.
En el auto, el juez decreta la anulación parcial de las grabaciones de comunicaciones telefónicas entre Bretón y su familia, con el abogado, algo a lo que Sánchez de Puerta responde argumentando que “por lo menos me cabe la tranquilidad de que mis protestas fueron razonadas” y manifiesta que se le “estuvo escuchando en determinadas ocasiones, cosa que está prohibida por la ley”.
Es más, aclara que “si el auto reconoce que quedan anualdas las ecuchas, es por que se efectuaron”, con lo que junto al Colegio de Abogados de Córdoba decidirá qué “camino seguir”, y advierte que “si a esto no le ponemos coto, difícilmente podremos llevar una línea de defensa acorde con la ley de ordenamiento jurídico”.
POSIBLE NUEVO IMPLICADO POR DINERO
Entretanto, el letrado ha decidido finalmente no recurrir el auto de procesamiento dictado por el Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba en el sumario, en el que el juez no descarta la implicación de otra persona en el caso. Sánchez de Puerta argumenta su decisión de no presentar recurso, porque “no lo considera oportuno ahora mismo, sé la opinión del juez, la de la sala y sería perder el tiempo y adelantar mi defensa”.
El auto de procesamiento subraya en relación a la implicación de otra persona que “no puede ni confirmarse ni descartarse tal hipótesis, pensando que dentro de las precauciones que pudiera haber tomado el encartado a la hora de urdir su plan, pudiera estar la de contactar en persona con el desconocido tercero que, bien por amistad, o más bien por dinero, se ofreciera simplemente a estar en la parcela esperando a José, y en un momento determinado posiblemente al salir el coche, realizara el trasvase de los dos menores a otro vehículo en el que se llevaría a los dos niños a cualquier ignoto o inimaginable lugar”.
“La presencia e intervención de un tercero facilitaría completamente la explicación de cómo es posible que José hubiera conseguido borrar del mapa a sus dos hijos sin dar pistas ni señal alguna de ellos”, si bien matiza que tras un exhaustivo examen del tráfico de llamadas no ha podido darse con el perfil de alguna persona que pudiera encajar con alguien dispuesto a hacer un favor “tan grande” a Bretón.