Las compañías de telefonía móvil camuflan sus antenas en palmeras y chimeneas, afirmó este domingo el abogado de la Asociación de Afectados por las Antenas de Telefonía Móvil (ATEMO), Pablo López, durante la concentración convocada en la capital grancanaria.
El médico Juan de la Várcena, jefe de Servicio del Hospital Doctor Negrín en excedencia, agregó que también las esconden en árboles y aires acondicionados, por lo que pidió “cárcel” para los responsables de esconder de la población antenas “que hacen daño a la salud de las personas”.
Dado que la Sanidad pública no ha hecho estudios epidemiológicos, los han realizado los vecinos de las antenas, que han detectado hasta cuarenta muertes en una misma calle, aseveró el facultativo, quien añadió que en la situación actual, sobre casas y edificios, “perjudican y enferman” a la población, lo que está “bien claro”.
La Asociación, prosiguió, no está en contra de los teléfonos móviles sino contra la ubicación de las antenas, pues deben estar en las periferias de los barrios y acercar la señal con pequeñas antenas, como pudo comprobar recientemente en Sudáfrica y como se realiza en el resto de Europa.
El letrado de la Asociación detalló que conoce antenas escondidas en El Secadero, en la capital grancanaria, donde se camuflan dentro de chimeneas extractoras, y en el sur grancanario, donde el “zumbido” que emiten pequeñas palmeras artificiales delatan que se trata de antenas para móviles.
Cuarenta muertos en torno a la calle Primero de Mayo
El letrado explicó que uno de los activistas de ATEMO, Alejandro Quintana, que lucha desde 2001 por quitar la antena situada en la calle Primero de Mayo de la capital grancanaria, ha elaborado una lista “macabra” de seis páginas con la identidad de las personas fallecidas en un radio de doscientos a trescientos metros.
Las causas de estas muertes coinciden con las detalladas en la Declaración de Friburgo, promovida por la Asociación Interdisciplinar para la Medicina Ambiental y firmada en 2002 por 22 especialistas y hasta la fecha respaldada por 170 facultativos.
La Declaración detalla los síntomas y dolencias que han registrado incrementos en zonas en las que se han instalado antenas móviles, agregó López, quien dijo que dicha relación se puede consultar en internet.
ATEMO prosiguió hoy su campaña de recogida de firmas -hasta el momento unas 4.500-, para promover una iniciativa legislativa que regule el sector, porque de momento sólo hay algunas ordenanzas municipales básicas, aseguran sus responsables.
El abogado subrayó que trabaja por la causa gratuitamente, por lo que animó a cualquier afectado a acercarse a su despacho, desde donde tramita hasta ocho expedientes de antenas con licencias concedidas a su juicio de forma irregular, pues algunas, la más llamativa en Santa Cruz de Tenerife, han sido concedidas en apenas dos días.
Los paseantes de la Playa de Las Canteras, jóvenes y mayores, estamparon su firma por la causa, aunque hubo alguno que exclamó “no a los móviles y el que menos tiene, tiene tres o cuatro en el bolsillo”, mientras una vecina consideró que las antenas afectan pero no son la única causa de los cánceres que padece la población.
Los manifestantes acudieron con cruces de flores y pancartas en contra de las antenas de “jodafone” y aseguraron que en La Isleta se han producido 42 muertes en tres meses, y 12 en apenas 60 metros de radio en otros núcleos poblacionales.
Detallaron que las radiaciones no sólo producen cáncer y muertes, sino dolores de cabeza, depresión, insomnio, arritmias, empeora el alzheimer y propaga el síndrome de los “oídos taponados”, pues “millones de teléfonos funcionan a la vez”.