El 'software' se presenta esta semana en el I Encuentro Etorbizi de Bilbao
BILBAO, 9 (EUROPA PRESS)
Nesplora, empresa ubicada en San Sebastián, presenta en el I Encuentro Etorbizi de Innovación Sociosanitaria, que se celebra en Bilbao, un sistema de realidad virtual, 'Isla Calma', que distrae de los procedimientos molestos o para los que se sufre miedo al dolor, como un tratamiento dental, una cirugía menor o un procedimiento diagnóstico.
El Encuentro Etorbizi pretende “crear un foro en el que podamos aprender de la experiencia de proyectos y especialistas de referencia en nuestro ámbito y a escala internacional sobre procesos de innovación sociosanitaria en el País Vasco”, ha explicado el director de proyectos de Etorbizi, Gerardo Zamora.
El desarrollo de Isla Calma es, a juicio de Zamora, “un ejemplo de cómo la investigación puede aportar ideas útiles y novedosas en el ámbito sociosanitario”.
Isla Calma es un software diseñado para que el paciente interactúe con un escenario relajante, a través de una gafas 3D y un mando inalámbrico, antes y durante la intervención.
Según Unai Díaz, psicólogo de Nesplora, que presenta el programa en el Encuentro Etorbizi, “la herramienta busca que la atención del paciente se distraiga del dolor mientras visita a un lugar paradisíaco y que no esté nervioso ni pendiente de lo que le están haciendo. La persona tiene un rol activo y puede interactuar con el programa y así se incrementa el umbral del dolor”.
ODONTOLOGÍA, QUIMIOTERAPIA Y EMBARAZO
El sistema se ha probado en pacientes odontológicos, en sesiones de quimioterapia y en mujeres embarazadas antes de dar a luz. Los estudios en que se basa esta aplicación muestran que los pacientes tienen menos náuseas, presión arterial más baja, pueden perder la noción del tiempo y piden menos analgésicos tras el tratamiento, destaca Unai Díaz.
Una investigación de la Universidad de Barcelona sobre el uso de realidad virtual en consulta publicado el pasado año en la revista Studies in Health Technology and Informatics revelaba que “la mayoría de los participantes que experimentaban distracción con realidad virtual interactiva reportaron menos intensidad del dolor”. Este resultado era menor en el caso de realidad virtual pasiva.
El programa dura tres horas, aunque puede interrumpirse o reanudarse en cualquier momento. Las gafas permiten aislar a la persona por completo o dejarle ver lo que pasa a su alrededor mientras juega o se relaja en ese entorno. Hay ocho escenarios en los que se desarrolla la acción, desde un jardín japonés con un estanque de carpas hasta el mar o una colonia de tortugas. La música, el paisaje y los animales ayudan a que el paciente esté más relajado y que los profesionales trabajen de forma más rápida y concentrada.
El uso de Isla Calma está recomendado en consultas odontológicas, para personas con aversión al dentista o que prefieren distraerse mientras se realiza el procedimiento, así como en unidades de dolor y tratamientos crónicos, en intervenciones con anestesia parcial, en centros sanitarios que realizan procedimientos molestos o dolorosos, como las biopsias, las infusiones de medicamentos o las diálisis, y también en grupos de investigación en dolor, y en tratamientos de ansiedad y estrés.
La empresa Nesplora también ha desarrollado sistemas de realidad virtual para pacientes con trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad, esquizofrenia, daño cerebral adquirido y adicciones.