Detectan prácticas abusivas por parte de empresas de desinfección y desratización

La Dirección General de Salud Pública del Gobierno canario informó este jueves de que en los últimos meses se han detectado prácticas de promoción abusiva por parte de empresas que ofrecen servicios en materia de desinfección, desratización o prevención de la legionela.

En un comunicado hecho público, la Dirección General de Salud Pública recomienda exigir la acreditación identificativa como Técnico Inspector de Salud Pública, en el caso de que alguna persona pretenda supervisar una empresa o los procesos de trabajo y productos biocidas que emplea.

Según la nota, el asesoramiento que ofrecen estas empresas que cometen prácticas abusivas o engaño, “nada tiene que ver con la labor de inspección sanitaria ni con la Dirección General de Salud Pública”.

Destaca que es importante que los establecimientos que contratan servicios de desinsectación, desratización y desinfección exijan a la empresa que va a realizar los tratamientos con biocidas la debida autorización expedida por la Dirección General de Salud Pública.

Así mismo, recomienda que se compruebe la inclusión de esa empresa en el registro obligatorio Registro Oficial de Establecimientos y Servicios Biocidas de la Comunidad Autónoma de Canarias, pues, en caso contrario, no se estaría dentro de la legalidad establecida.

Los biocidas, que son sustancias que impiden la acción o ejercer el control sobre cualquier organismo nocivo por medios químicos o biológicos, están regulados por la Directiva 98/8/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16 de febrero, señala la nota.

La normativa controla 23 tipos de productos, entre ellos se incluyen los desinfectantes utilizados en los ámbitos de la vida privada y de la salud pública, los insecticidas, acaricidas, rodenticidas y repelentes, entre otros.

Las empresas del sector alimentario y aquellas en las que existan las instalaciones de riesgo recogidas en la legislación de aplicación (por ejemplo, bañeras de hidromasaje, torres de refrigeración, instalaciones de spa -salud por agua-, agua caliente sanitaria centralizada, etc) están obligadas a contar con planes de control de plagas y con los programas de mantenimiento establecidos, recuerda la nota.