El PSOE ha advertido este viernes de que la reducción del esfuerzo presupuestario en Educación, que en 2015 cae del 4% al 3,9% del PIB, provoca “un descenso vertiginoso” en calidad e igualdad de oportunidades y le va costar a España “un retraso histórico en desarrollo económico y social”.
En un comunicado, el secretario de Educación del PSOE y consejero de este área en el Ejecutivo canario, José Miguel Pérez, valora así el escenario que recoge el plan presupuestario para 2015 que el Gobierno de Mariano Rajoy ha remitido a la Comisión Europea.
Pérez sostiene que bajar el esfuerzo presupuestario en enseñanza “no solo degrada el propio derecho educativo” y afecta a los derecho constitucional a la educación, sino que además “cercena el futuro desarrollo económico de España”.
El portavoz de Educación del PSOE considera “absolutamente necesario que se rectifique”, algo que su partido va a solicitar “de inmediato en todos los ámbitos institucionales”.
“España no se puede permitir retroceder más en gasto educativo”, afirma Pérez, que insta al Gobierno central a que retome “la senda de incremento del gasto en educación respecto al PIB” para poder salir de la crisis “con garantías de éxito y promover un cambio de modelo de crecimiento económico”.
Los socialistas denuncian que “España se descuelga de la apuesta de futuro que está haciendo el resto de Europa, que en plena crisis ha reforzado su apuesta por el conocimiento y la formación.”
A su juicio, esta legislatura del PP han supuesto “un retroceso histórico en el derecho a la educación”, que hace “imposible dar garantías efectivas al derecho a una educación de calidad”.
“Es imposible que ante el aumento de las necesidades educativas, de alumnos, la respuesta sea la reducción drástica en el número de docentes, de programas de apoyo y ayudas que permitan superar las desigualdades socioculturales de origen”, argumenta Pérez.
El secretario de Educación del PSOE subraya que su partido defiende que el gasto en educación no baje nunca del 5% del PIB y se propone elevarlo para alcanzar en ocho años el listón del 7%, “haciendo así posible que España se incorpore a la locomotora de los países que apuestan por el conocimiento y el alto valor añadido del trabajo en el futuro”.