El hospital flotante Esperanza del Mar cumple 25 años de asistencia sanitaria en alta mar, una labor que ha desempeñado entre 1982 y 2001 con su primer buque y desde ese año con un segundo barco que faena desde hace seis, informó este lunes el Instituto Social de la Marina.
Con motivo de este cuarto de siglo de servicios en alta mar, así como del aniversario de su llegada a Gran Canaria para partir por primera vez hacia el caladero canario-sahariano, el Instituto Social de la Marina organizará diversas actividades.
La idea de poner en marcha un buque sanitario para cubrir las necesidades de la flota en el banco pesquero surgió en 1977 con el triple objetivo de prestar asistencia sanitaria, salvar vidas en el mar y ofrecer auxilio marítimo y técnico, explica.
Así, en el aspecto sanitario el buque ofrecería consulta ambulatoria, hospitalización para tratamiento de enfermedades o accidentes e intervención quirúrgica, entre otras.
Además, estaría dotado de un taller de reparaciones y de dos hombres-rana para reparar en el mar diversidad de averías como roturas de timones o redes enredadas, y preparado para proporcionar agua potable, suministrar combustible y realizar traslados.
Todo ello quedó plasmado en el concierto que firmó el Ministerio de Trabajo, Sanidad y Seguridad Social con el Instituto Social de la Marina en noviembre de 1981.
El primer barco costó 511 millones de pesetas y tenía una eslora de 81,65 metros, autonomía superior a 5.000 millas, capacidad para 262 metros cúbicos de combustible y 295 de agua.
En sus 19 años de servicio navegó 795.746 millas durante 128.159 horas, lo que equivale a 4.609 días de mar o, lo que es lo mismo, quince años de travesía ininterrumpida.
En ese tiempo, realizó 60.209 prestaciones sanitarias, de las que 24.602 se resolvieron mediante consultas radiomédicas, 5.630 con asistencias ambulatorias y 1.302 con atención prestada a bordo del propio barco pesquero, y en total acogió a 4.111 hospitalizados y 2.048 intervenciones quirúrgicas.
El 71% de los marineros asistidos fueron españoles, el 23 marroquíes y el resto de otras nacionalidades.
Aparte de las asistencias sanitarias, realizó 6.644 logísticas, sus buzos actuaron en 1.480 ocasiones y recogió a 691 náufragos, aunque en agosto de 2001 realizó su último viaje al caladero mauritano.
En 1993 se iniciaron los estudios para la construcción de un nuevo buque ajustado a las necesidades del siglo XXI, más moderno y versátil, así que en 1999 se contrató la construcción de la nueva nave por importe de 2.990 millones de pesetas.
El buque, que precisó otros 500 millones para equipamiento, fue inaugurado en julio de 2001 en presencia de la Infanta Cristina.
Este hospital flotante tiene 97,83 metros de eslora, capacidad para 694,2 metros cúbicos de combustible y 488 de agua, y autonomía para más de 7.000 millas con un número máximo de 88 personas a bordo entre pasajeros, hospitalizados y personal.
El hospital ocupa una cubierta completa con acceso directo al helipuerto, cuenta con quirófano, rayos X, laboratorio, UCI, unidad de quemados, infecciosos y enfermos siquiátricos.
Este barco, además de prestar asistencia en el banco canario-sahariano, está preparado para acudir a cualquier parte del mundo donde se concentre flota española que requiera su asistencia.
Incorpora nuevas tecnologías, comunicación por satélite y videoconferencia, lo que ayuda a resolver problemas de distancia entre el enfermo y el facultativo, subraya.
El nuevo Esperanza del Mar ha navegado, hasta el primer cuatrimestre de 2007, un total de 383.425 millas durante 1.740 días de mar.
En estos 25 años, ambos buques, cuyos servicios han recibido diversidad de premios y reconocimientos, ha atendido a 27.552 personas y ha prestado 8.081 asistencias técnicas a 3.362 buques.