Cinco expertos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) visitarán Gran Canaria y Tenerife desde este miércoles y hasta el lunes 13 para evaluar el sistema educativo canario “en doce horas de trabajo”, según reconoció el analista de este organismo, Mihaylo Milovanovich, tras reunirse con el presidente canario, Paulino Rivero, en Las Palmas de Gran Canaria.
La visita responde a una petición del propio Rivero formulada el pasado febrero, durante la reunión que mantuvo con el responsable del Informe PISA que elabora la OCDE, Andreas Schleicher, para que este organismo elabore un programa de actuaciones específico “que permita al Archipiélago mejorar su posición en el panorama educativo internacional”.
Los expertos ya han solicitado a la Consejería de Educación los datos básicos del sistema como ratio de alumno por aula o el número de profesores, pero la información específica sobre los diferentes programas educativos que se están llevando a cabo la recabarán durante los próximos días.
La entrega de dicho informe aún no tiene fecha, señaló Milovanovich, porque tras visitar dos centros en Gran Canaria y otros dos en Tenerife, reunirse con responsables municipales, las universidades canarias o los sindicatos, analizarán todos los datos que recaben y “les daremos un enfoque práctico” para “ayudar al Gobierno canario en el esfuerzo que ya realizan”.
Rivero negó que esta solicitud a un organismo externo para que evalúe la Educación en Canarias implique un reconocimiento de que las políticas que se han llevado a cabo en los últimos años hayan sido un fracaso. Para el presidente, esta auditoría externa refleja “la apuesta” de su Ejecutivo por este sector. Destacó también que el informe que resulte del análisis de estos expertos “será bueno para cualquier Gobierno”, lo presida él o no.
Milovanovich no adelantó qué parámetros concretos estudiarán para la realización del informe, pero sí señaló que los datos que recoge el informe PISA “son un buen punto de partida”. Destacó el “enorme compromiso” del Gobierno canario con la Educación, y advirtió que en este sector “no existen soluciones rápidas”.