“Nos mueve el deseo de que la amarga experiencia que vivimos aquellos días en Ifema no la vuelva a vivir ninguna familia”, declaró este jueves a la Cadena Ser Federico Sosa, presidente de la comisión gestora de la Asociación de Afectados del Vuelo JK 5022, constituida este miércoles en Las Palmas de Gran Canaria. Quizá por eso, el colectivo pide a la prensa que “evite los detalles que nos hacen sufrir”.
Federico Sosa explicó durante la entrevista mantenida en el programa El Drago que “la idea de esta asociación es pedir que se esclarezca todo lo sucedido y estar presentes en la causa” judicial que se derive, si bien prefirió ser cauto sobre todas las cuestiones relacionadas, tanto con la investigación, como con los posibles mecanismos de defensa de las familias.
El contacto con los familiares a través de la asociación permitirá, según Sosa, “seguir exigiendo apoyo por parte de las administraciones [públicas], con el mantenimiento de la oficina de atención, y que la investigación sea rigurosa con las negligencias que se hubieran podido cometer por parte de quien fuera”.
Según Sosa, la asociación está todavía en proceso de constitución formal, ya que por ahora se ha promovido una gestora que luego elegirá una junta directiva. Por esta razón, el presidente provisional del colectivo mantiene la cautela sobre la investigación técnica del accidente y la situación jurídica que se derive.
“No queremos dar credibilidad a la información que está saliendo en prensa hasta que culminen las investigaciones”, dijo Federico Sosa, que se preguntó “cómo es posible que de una investigación que se dice secreta y rigurosa estén saliendo datos” a los medios de comunicación.
En cuanto a la irrupción de bufetes de abogados norteamericanos que ofrecen indemnizaciones millonarias a las familias, Sosa se mostró todavía más cuidadoso: “preferimos no opinar porque todavía hay mucha desinformación”, concluyó.