El FotoMatón

Cinco años antes de que Valerie Solanas intentara acabar con la vida de Andy Warhol, el padre de la cultura pop sobrevivió a estos cuatro disparos al salir del fotomatón que habían instalado en el cruce de las avenidas Broadway con la Séptima.

El abuelo del moderno selfie ignoraba que mientras él ponía caras tras las cortinas alguien, de manera sincronizada a los disparos de aquella cámara instantánea, recibía un balazo en otro punto de la ciudad. Siempre distinto.

Todos los muertos aparecían con una polaroid en sus bolsillos. Era la cara de Warhol, en una de aquellas primeras sesiones de foto matón, y escrito en la trasera una frase que sonaba a sentencia de muerte. “Out of focus, bad luck”. “Fuera de foco, mala suerte”.

Fdo. El Foto matón.