El real decreto que regulariza la prescripción de medicamentos por parte de los enfermeros no ha convencido a los profesionales de la Sanidad canaria. Los médicos se han sumado al rechazo mostrado por estos sanitarios, a quienes se le limitarán sus competencias, ya que consideran que “sobrecargará” las consultas.
La presidenta del Sindicato Profesional de Médicos de Las Palmas, Carmen Nuez, cree que esta normativa “entorpecerá” la cadena de organización de trabajo de los profesionales. Y es que, a partir de ahora, los pacientes tendrán que pedir hora con su médico de cabecera para ser atendidos en cuestiones que siempre han realizado los enfermeros, tales como poner una vacuna o que les realicen curas.
Por tanto, Nuez señala que se trata de un decreto que afecta tanto a enfermeros, al limitar sus atribuciones; a médicos y, sobre todo, a los usuarios “a quienes le harán dar mil vueltas”. Los pacientes tendrán que pasar primero por consulta, con el fin de que se le rellene un papel y será con la firma del médico con lo que el enfermero podrá hacer su trabajo, cuando para muchas funciones “están más que capacitados”, remarca la presidenta del sindicato.
Los médicos pedían que se legalizara la situación de los enfermeros, que hasta ahora se encontraban en una situación de “alegalidad” al recetar medicamentos libres de prescripción, tales como el Ibuprofeno o el Paracetamol. Sin embargo, tras la publicación en el BOE de este este decreto el pasado 23 de diciembre, después de ser aprobado por el Gobierno estatal, “nos encontramos con una realidad bien distinta, pues se le dan menos competencias”, destaca Nuez.
La normativa olvida a los enfermeros que trabajan en residencias de ancianos o a los que van en ambulancias de asistencia básica, remarca la portavoz de este sindicato, que añade que muchas normas se aprueban en los despachos sin tener en cuenta la realidad que viven los profesionales. Además, puntualiza que en el día a día se pueden producir desencuentros o malestar entre médicos y enfermeros, al no entender que tengan que esperar por una firma para poder desempeñar sus funciones.
Actualmente, los auxiliares de farmacia sí que despachan medicamentos libres de receta médica, lo que agrava más la cuestión, puesto que según Nuez no se entiende que los enfermeros no puedan seguir haciendo esta práctica. “Por qué si un paciente tiene un dolor, no le pueden decir que se tome un Paracetamol cada 8 horas...” se plantea.
Por estas cuestiones, el sindicato médico se muestra en desacuerdo en cómo se ha materializado finalmente este decreto, al igual que ha hecho el Gobierno de Canarias. El colectivo cree que este debe ser revisado y tratar de que “sin incurrir en una ilegalidad” se busque la forma de que los enfermeros puedan seguir teniendo estas competencias que ya venían realizando.
Cabe recordar que el sindicato Satse se ha mostrado también especialmente crítico con este asunto y ha alertado de la posibilidad de que se produzca un colapso en los hospitales canarios, algo que el sindicato de médicos considera que con el tiempo se irá viendo, aunque insisten en que está claro que “una sobrecarga” de las consultas sí que se va a producir.