La Guardia Civil ha detenido a nueve personas y se ha incautado de media tonelada de hachís en una operación, en la que, según informa, se ha desarticulado una de las organización de narcotraficantes más activa de Canarias.
Una nota de la Guardia Civil informa de que la denominada operación Teide ha sido realizada en varias fases por el Equipo de delincuencia organizada y antidroga perteneciente a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife (EDOA) y el Equipo contra el crimen organizado (ECO) de Canarias.
La nota indica que las investigaciones comenzaron a principios de febrero cuando se detectó la presencia en Canarias de una organización considerada de las más activas y potentes que operaban en territorio nacional y en Marruecos y que poseía un estructura que controlaba desde la compra de la planta hasta la distribución de la droga tanto en territorio nacional como en terceros países, como Alemania e Inglaterra.
Al parecer esta organización trabajaba bajo el encargo de otras organizaciones criminales.
La Guardia Civil informa de que el líder de esta organización, que vivía entre Marruecos y España, estaba asociado con una persona que se encargaba del aparato logístico en la filial grancanaria y que al parecer era un conocido empresario del sector de la hostelería.
También destaca el papel de otro hombre grancanario que tenía la función de buscar a personas interesadas en financiar y adquirir grandes partidas de la sustancia estupefaciente, para una vez contactados les acompañaba hasta la zona de Marruecos en la que la organización criminal tiene depositada la droga.
Para ello utilizaban grandes medidas de seguridad y rutas estratégicas para evitar los controles de inteligencia.
Para la Guardia Civil, estas medidas de seguridad tan extremas, denotaban el calado de las operaciones en las que estarían involucrados los miembros de la organización.
Durante la investigación se logró identificar al encargado de la custodia de la droga, que una vez que llegaba a las costas canarias, era ocultada en el interior de un garaje de la vivienda, que a su vez había sido facilitada por la empresa de otro supuesto miembro de este grupo.
A principios del mes de mayo, la Guardia Civil detecta detectaría como los miembros de la organización comienzan a iniciar el despliegue de actividades ya que habían conseguido introducir un alijo en la isla de Gran Canaria.
Los investigadores, prosigue la nota, detectaron la presencia de miembros de otras posibles organizaciones en el barrio Santidad, en Arucas, quienes se reunían con el conocido empresario de hostelería, y se localizó en una urbanización de este barrio el lugar donde se ocultaba la sustancia estupefaciente.
Al acceder al garaje se localizaron 470 kilogramos de hachís distribuidos en fardos así como una plantación oculta de marihuana que al parecer estaba destinada a un supuesto club de consumidores.
En otros registros realizados se localizó al empresarios de hostelería junto con el titular de la empresa que facilitaba la vivienda donde se ocultaba el alijo, y que al parecer portaba una bolsa con 20 kilogramos de hachís.
Según el relato de la Guardia Civil, el empresario consiguió huir pero finalmente fue detenido y localizado con otra bolsa también con unos 20 kilos de droga.
Tanto el líder de la organización grancanaria que supuestamente encargó la droga como su persona de confianza, ambos naturales de Melilla, se ocultaron en la Costa del Sol, y viajaron posteriormente la ciudad autónoma, donde fueron detenidos.
La Guardia Civil indica que el líder de la organización es una persona de gran importancia en el mundo del narcotráfico en el norte de África y Marruecos.
La operación ha concluido con la detención de ocho hombres y una mujer así como la entrada y registro en siete domicilios y un restaurante en Las Palmas de Gran Canaria.
Asimismo se ha solicitado órdenes internacionales de detención contra varios miembros de la organización receptora de Gran Canaria.