El jefe de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria, Federico Grillo, ha informado que el incendio de Valleseco, que se inició el pasado 17 de agosto y está controlado, aún no está liquidado, ha quemado 8.500 hectáreas, “que irán variando”, ha afectado al 32% del Parque Natural de Tamadaba y ha quemado “solo” 15 viviendas.
Grillo, quien ha comparecido para explicar en profundidad los tres incendios forestales que sufrió la Isla en agosto, no descarta que haya algún reinicio porque “generar chispas es bastante sencillo” si las temperaturas aumentan. En cualquier caso, augura que “cada vez irá a menos”. Además, destaca que hasta que no finalice el verano y haya algo de lluvia, hay que seguir cubriendo el resto de la Isla porque el riesgo aún es latente.
El jefe de Emergencias ha destacado la labor de la gente que ha hecho limpieza perimetral de sus viviendas y las unidades que las han defendido. Sobre la afección a Tamadaba, Grillo ha resaltado que el giro del viento favoreció que la quema del pinar fuera menor de lo esperado. “Se recuperará bastante rápido”. También ha explicado que en el Parque Natural no están permitido el uso de quemas prescritas, pero las labores de prevención, hechas a manos, también contribuyeron a que el área recreativa “quedase bastante bien”.
Tras un recorrido por los últimos 20 años de historia de incendios en Gran Canaria, Grillo ha desvelado que solo tres han generado la mayor superficie quemada: el de 2007 (18.000 hectáreas), el de 2017 (2.000 hectáreas) y los de 2019 (9.800 sumando el de Artenara y Cazadores).
Sobre las causas del incendio de Valleseco, Grillo ha afirmado que aún no se puede adelantar nada porque “está en manos de los investigadores” y se siguen manejando dos hipótesis: “Una causa humana o una línea eléctrica”. En cualquier caso, destaca que la causa de los grandes incendios forestales es “común en el primer mundo”, donde ya no se consume leña ni se recoge pinocha. “Los productos que antes se recogían en el campo ahora están abandonados y son combustible”.
Conclusiones
ConclusionesEl jefe de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria ha desgranado las consecuencias de los incendios en la Isla, citando en primer lugar que ha ocasionado “menores daños de los esperados”. Ha resaltado que las áreas que sirven como cortafuegos han funcionado bien y ha recomendado aumentarlas.
También ha puesto en valor el pastoreo, que ayuda a “aplastar el combustible” y contribuye a que la llama se “reduzca”, así como la importancia de los cultivos. Especialmente ha incidido en la labor divulgativa que se debe realizar desde las instituciones para instar a la población a autoproteger sus viviendas y limpiarlas perimetralmente.
Grillo ha señalado que las unidades para extinguir incendios están muy fraccionadas en Canarias y ha aconsejado integrarlos todos bajo un mismo mando, como se ha hecho recientemente junto a efectivos de Península. “Es difícil, pero se puede”.
Por último, ha hecho hincapié en la importancia de la información en este tipo de catástrofes. “Que la población vea cómo se trabaja en la extinción de incendios, que les contemos lo que ha pasado, lo que está sucediendo y lo que podría acaecer”.