El realojo de los aproximadamente 10.000 vecinos que tuvieron que ser evacuados por el incendio declarado el sábado 17 de agosto en la cumbre de Gran Canaria ha concluido este viernes con la vuelta a sus viviendas de los vecinos de los núcleos de El Sao y Guayedra, en el municipio de Agaete, y de Mesas de Galaz en San Mateo.
De este modo, el Gobierno de Canarias ha comunicado que “con estos núcleos finaliza el realojo de los vecinos evacuados” de 10 municipios y 56 núcleos de población durante los primeros días de este incendio forestal.
Asimismo se abren las carreteras GC-230 (Tejeda) y GC-231 (El Sao), de tal forma que solo permanece cerrada la GC-216 (Tamadaba).
El Cabildo de Gran Canaria ha pedido a los ciudadanos que no accedan a la cumbre de la isla, ya que el incendio aún no ha sido extinguido. Según ha explicado el jefe de Emergencias de la corporación insular, las carreteras aún son peligrosas. “La vegetación fija las piedras, cuando se quema, caen. Justo al pasar un incendio las carreteras están inundadas de piedra y siguen cayendo”, ha explicado Federico Grillo, que recomienda “limitar los movimientos al mínimo”, para los vecinos y las personas que tengan que trabajar.
El técnico del Cabildo insta a la población a esperar al menos “una semana o 10 días” para que la situación se calme, los operarios de Carreteras y los bomberos culminen los trabajos y el incendio se dé por extinguido. “Subir ahora solo aumenta la vulnerabilidad de la población y entorpecer los trabajos. Si hay un reinicio, las unidades se tienen que mover y en algunos casos se atasca la cumbre porque es un espacio limitado”.
Según ha apuntado el ministro en funciones de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, desde que se originó el fuego en el barranco del Crespo, en el municipio Valleseco (Gran Canaria)se estima que están afectadas 10.346 hectáreas, con un perímetro conjunto de 112 kilómetros.