Otros 25 operarios, en este caso de la sociedad estatal Tracsa, se incorporaron este lunes a las labores de limpieza del vertido de fuel que se produjo este domingo en Bocabarranco y que no han cesado durante la noche, informaron fuentes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Durante el domingo, operarios de diversos servicios públicos y privados trabajaron en la limpieza del combustible, entre ellos personal de la Policía Local, Salvamento Marítimo, Dirección General de Costa, DISA y del Ayuntamiento capitalino, a los que se sumarán 25 de Tracsa, empresa especializada en actuaciones urgentes por catástrofes, aunque no se descarta nuevas incorporaciones a lo largo de la jornada.
El vertido se produjo por una pequeña brecha en una tubería de combustible de la central eléctrica de Unelco en Jinámar, según averiguó el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
Según el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, unos testigos afirmaron que durante la madrugada escucharon pequeñas explosiones en el lugar, donde trabajadores de DISA, a la que pertenece la tubería, comenzaron el operativo de control y limpieza de la mancha.
Según el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, la marea alta ha desplazado la mancha hacia la costa, lo que está facilitando la recuperación del grueso del vertido y este lunes, con la marea baja, los trabajos de limpieza se centrarán en el litoral con máquinas de vapor.