La piscina municipal León y Castillo de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, reabrió este lunes sus puertas “en condiciones adecuadas” para su uso por los vecinos de este barrio, después de que “la higiene, los servicios y el estado de las instalaciones en el que nos la encontramos nos obligaran a su cierre”.
Así lo explicó el propio alcalde, Jerónimo Saavedra, que este lunes asistió al acto oficial de reapertura, en el que insistió en “la dignidad” que tienen las nuevas instalaciones. El edil de Deportes, Roque Díaz, valoró la instalación “dejada por el anterior grupo de gobierno, (en referencia al Partido Popular) que ahí está y es magnífica”, pero criticó el estado en el que quedaron otras zonas. “Lo que no se puede hacer es dejar una obra a medias”, lo que obligó, según Díaz, a un cierre temporal y a realizar “una profunda reforma” que ha costado un millón doscientos mil euros, aproximadamente.
Este dinero se ha invertido en la reconstrucción de la zona de vestuarios, que ocupan una zona de 300 metros cuadrados, la creación de aseos públicos para los espectadores que acudan a las competiciones, y la instalación de climatizadores en el techo para el agua que se utiliza tanto en la piscina como en los vestuarios y aseos.
Desde la apertura del plazo de inscripción ya lo han hecho unos 1.500 vecinos de la capital, que podrán utilizar las instalaciones a razón de unos mil al día. Existe lista de espera, pero el Ayuntamiento confía en poder atender toda la demanda a través de las numerosas actividades que se pondrán en marcha “desde mañana”, aseguró Díaz.
El acto de reapertura consistió en el descubrimiento de una placa, un breve recorrido por las instalaciones y la exhibición de una nadadora internacional de sincronizada, Marta Gómez, perteneciente al Club Natación Metrople.