Flor María Camacho Torres es la primera víctima mortal que se registra este año en Navarra “por violencia machista”, según subrayó el Gobierno Foral, que ha convocado para este viernes en Pamplona una concentración de condena por el asesinato y de solidaridad con la familia de la mujer.
La joven fue hallada en su domicilio con síntomas de estrangulamiento, después de que apareciera el cuerpo sin vida de su pareja sentimental, Héctor David Morejón García.
El cadáver del hombre fue hallado por un vecino sobre las 9:30 horas colgando de un árbol en un paraje cercano al alto montañoso en el que se encuentra el monumento del Corazón de Jesús, en las afueras de la capital ribera.
Fuentes de la Policía Nacional, encargada de la investigación, señalaron que las fuerzas de seguridad investigaron durante la mañana de este jueves las circunstancias del suceso y fue sobre las 16:00 horas cuando acudieron al domicilio del fallecido, donde hallaron debajo de una cama el cadáver de su compañera sentimental con signos de estrangulamiento.
Por su parte, fuentes de la Policía Municipal de Tudela explicaron que la mujer trabajaba en una empresa de congelados de la ciudad y convivía con el hombre en una habitación que tenían realquilada en una vivienda de la calle Díaz Bravo.
Las mismas fuentes señalaron que fue la propietaria del piso la que advirtió que la mujer no había ido este jueves a trabajar, por lo que alertó de su ausencia a la Policía, que finalmente encontró su cadáver bajo la cama de la habitación.
El cadáver fue levantado por orden del juez sobre las 20:00 horas y trasladado al Hospital Reina Sofía para la práctica de la autopsia.
La hipótesis que baraja la Policía Nacional es que el joven mató a su novia y después se suicidó, aunque fuentes de este cuerpo subrayaron que la investigación continúa.
Por su parte, desde la Policía Municipal y el Gobierno de Navarra apuntaron que no se tiene conocimiento de que la joven hubiera interpuesto denuncia alguna por malos tratos.
El alcalde de Tudela, Luis Casado, de UPN, tras expresar su solidaridad con los familiares de las víctimas, mostró su “indignación y preocupación” por el asesinato, al tiempo que invitó a las mujeres a denunciar cualquier tipo de agresión.
Al respecto, recordó que en Tudela se trabaja en el tema de la violencia doméstica a través del Centro Integral de la Mujer, e incidió en que casos como éste “nos tiene que animar a luchar más por conseguir que la mujer sea capaz de denunciar y despojarse de esa culpabilidad que a veces tiene”.
“Hay que invitar a las mujeres a perder el miedo a denunciar estos hechos, ya que cualquier pequeña lesión luego se convierte en temas fatales”, insistió Casado, quien agregó que “hay que animar a la gente a romper esos lazos que no llevan a nada”.
Recordó asimismo que en Tudela existen más de 4.000 inmigrantes, de los que el 60% son de origen sudamericano, en especial ecuatorianos y colombianos, y subrayó que “nunca nos había tocado ningún caso como éste y esperamos que sea el último”.