La Marea Blanca que el 10 de diciembre se ha convocado en toda España por la mejora de la sanidad pública denunciará en Canarias un aumento “exagerado” de la privatización de servicios de salud que asegura ha favorecido el actual consejero del área, José Manuel Baltar.
Consejero al que ha acusado este viernes de gestionar la sanidad regional primando “el beneficio privado” sobre la salud de los ciudadanos la portavoz de ese movimiento en Gran Canaria Xili Delgado, que, como prueba de ello, le ha achacado la iniciativa de “poner un servicio pediátrico de 24 horas financiado con dinero público en el Hospital San Roque Meloneras”.
Empresa para la cual trabajaba precisamente Baltar antes de incorporarse al Gobierno Autónomo, ha destacado Delgado, que ha sostenido que esa es solo una de varias actuaciones suyas que han hecho crecer el gasto público en contratos con clínicas privadas “de forma exponencial” desde su nombramiento en 2017.
Y ha subrayado que ese año se rompió una tendencia a la baja en la concertación de servicios con empresas para paliar las carencias del sistema público de salud de las Islas que había conducido a que en el anterior ejercicio, 2016, no solo no aumentaran sino incluso disminuyeran los fondos destinados a esos contratos.
Los cuales, por contra, no han hecho sino aumentar desde la llegada a la Consejería de Baltar, según la Marea Blanca, que, como ejemplo más reciente de ello, le ha acusado de “hacer negocio con la medicina nuclear” que precisan determinados pacientes del hospital Doctor Negrín de Gran Canaria.
Un proceder que el movimiento, en colaboración con la Asociación de Defensa de la Sanidad Pública de Canarias, planeaba denunciar públicamente a través de una valla publicitaria que había contratado y que fue “censurada” menos de un día después de su instalación por iniciativa del Gobierno de CC, ha afirmado.
Su acusación ha sido respaldada por el exdirector general de Salud Pública de la Comunidad Autónoma Ricardo Redondas, socialista que ocupó entre 2015 y 2017 dicho cargo y acabó por dimitir y que, en calidad de portavoz también de la Marea Blanca, ha atribuido al actual Ejecutivo “un ataque a la libertad de expresión”.
Puesto que, si bien la propia compañía publicitaria a la que se había contratado la valla, Atlantis, fue la que la retiró al poco de haberla puesto y argumentó que se debía a un error porque habían olvidado que ese espacio ya lo tenían previamente reservado para una campaña, otras informaciones apuntan a que lo hizo instigada por sus autoridades.
Porque “recibieron presiones desde la Presidencia del Gobierno y desde la Consejería de Sanidad”, ha sostenido Redondas, que ha recordado que precisamente las fotos del presidente, Fernando Clavijo, y del responsable de Sanidad, Baltar, aparecían en esa valla junto al eslogan “No al negocio con la medicina nuclear”.
Por todo lo expuesto, ambos portavoces han dicho que estudian emprender acciones legales contra la empresa publicitaria y el Gobierno de CC por, supuestamente, “vulnerar la libertad de expresión”.
Acusación que se suma a la de que privatizan la sanidad pública y no trabajan como debieran para atajar las listas de espera, según la Marea Blanca, que, en consecuencia, ha reiterado su llamamiento a que los isleños secunden las manifestaciones que han convocado para el lunes próximo por la tarde en Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura.