La senadora de Nueva Canarias por la isla de Gran Canaria, María José López Santana, ha presentado en la Cámara Alta una moción ante la Comisión de Fomento en la que reclama al Gobierno el traslado de las actuales paradas de guaguas de transporte regular de viajeros del aeropuerto de Gran Canaria.
Asimismo, pide que “habilite una nueva zona” de paradas en un lugar adyacente a las terminales en las que embarcan y llegan los pasajeros, indica NC en un comunicado.
La parlamentaria nacionalista señala que las paradas actuales “están emplazadas, no de manera contigua a las terminales, sino junto a las vías de entrada y salida del recinto aeroportuario”.
A su juicio, esa lejanía “supone también una dificultad añadida para las personas con movilidad reducida y para las de más avanzada edad”, a lo que habría que añadir que con la ubicación actual las paradas “no gozan del abrigo suficiente, y los usuarios están expuestos a las inclemencias del clima, sobre todo al fuerte viento que es muy frecuente en la zona, cuando podrían estar a resguardo en la terminal”.
Para López Santana la disposición actual de las paradas conlleva que, “para acceder a las paradas de transporte público desde el aeropuerto, o a este desde las paradas, haya que atravesar el aparcamiento para vehículos privados”, a lo que se añade que “la señalización dentro del aeropuerto es insuficiente y confusa”, criticó.
En esta iniciativa, que se acompaña de varias preguntas al Gobierno con respuesta escrita, López Santana señaló como positiva la decisión tomada en 2014 por AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea) en coordinación con la Autoridad Única del Transporte de Gran Canaria, de “desplazar al recinto aeroportuario del aeropuerto de Gran Canaria las paradas de guaguas de transporte regular de viajeros que se encontraban en la autopista (GC-1)”.
Sin embargo, y a pesar de esa medida, la senadora nacionalista insistió en la “necesidad” de hacer este traslado a otro lugar más próximo a la terminal “que ofrezca garantías de seguridad, accesibilidad y resguardo”, porque -recordó- “la mayoría de los usuarios de transporte regular son usuarios cautivos, es decir, utilizan el transporte público porque no suele disponer de otra opción”.