La principal mancha de hidrocarburos derramada al sur Gran Canaria por el naufragio del pesquero ruso Oleg Naydenov se ha alejado ya 176 kilómetros de la costa, pero el estado del mar impide de nuevo recogerla, informan los ministerios de Fomento y Medio Ambiente, en un comunicado.
Las observaciones realizadas sobre la zona por Salvamento Marítimo han comprobado que, cumplidos siete días de su hundimiento, el arrastrero ruso sigue vertiendo combustible al mar, desde las profundidades a las que se encuentra (unos 2.400 metros).
También se ha comprobado que el núcleo principal del reguero de manchas se ha desplazado 46 kilómetros en las últimas 24 horas.
Al lugar del naufragio, unas 15 millas (27 kilómetros) al sur de Maspalomas (Gran Canaria) ha llegado esta mañana el Grampian Surveyor, el barco de la empresa noruega Otech contratado por Fomento para intentar acceder al pecio con un robot submarino.
El Ministerio precisa que el buque está en centrando en estos momentos su trabajo en determinar el punto exacto del fondo marino donde se encuentra el Oleg Naydenov, con la colaboración de una embarcación de Salvamento Marítimo, la Alpheratz, movilizada desde el puerto de Los Cristianos (Tenerife) para darle apoyo.
El buque de Otech cuenta con robot submarino operado por control remoto, capaz de descender hasta 3.000 metros de profundidad.
Se trata de un ROV de tres metros de longitud, cuatro toneladas de peso y 200 caballos de potencia, que intentará tomar imágenes del pesquero para comprobar en qué estado se encuentra.
La nota, difundida a las 15.00 horas (hora canaria), no precisa que el descenso del robot hasta el Oleg Naydenov haya comenzado.
Mientras tanto, sobre la zona afectada por el derrame se encuentran los barcos de Salvamento Miguel de Cervantes, Luz de Mar, Salvamar Talía y Punta Salinas, que siguen dispersando mecánicamente las manchas más ligeras, ya que el viento y el oleaje impiden recogerlas, como ha ocurrido todos estos días.