El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través de la sociedad municipal Sagulpa, ha conseguido una subvención para poner en marcha el sistema de patinetas eléctricas. Estos fondos representan el 40% del proyecto, en concreto 258.720 euros de una inversión total de 646.800 euros.
Tal y como afirma el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, “este es un ejemplo de la eficiente gestión desarrollada por Sagulpa que ya fue anunciada en los pasados meses, cuando nos comprometimos a no dejar pasar ni una sola oportunidad para conseguir fondos que nos ayuden a seguir trabajando por una movilidad sostenible e inteligente, basada en los datos”.
De este modo, y a pesar de las dificultades que atravesó Sagulpa a lo largo de 2020 como consecuencia de la crisis sanitaria, “proyectos que entendemos fundamentales para la mejora de la movilidad en la ciudad, podrán seguir adelante. Nuestra apuesta y nuestros objetivos son claros y las patinetas eléctricas, un recurso que nos venían demandando los ciudadanos, por fin podrán ser una realidad”.
Las patinetas eléctricas van a contribuir a unir la zona alta y la zona baja de la capital de manera que se pueda salvar el desnivel natural de la ciudad con un recurso que facilitará realizar trayectos cortos en Las Palmas de Gran Canaria. “De hecho -explicó el concejal- queremos que siga una distribución similar a la Sítycleta, que actualmente salva un desnivel de más de 100 metros entre la estación de la Avenida Marítima y la del Canódromo, por poner un ejemplo. Es evidente que ayuda a resolver los problemas de nuestra orografía con empinadas cuestas y por eso vamos a replicar esta idea en la distribución de las bases de patinetas eléctricas”.
La decisión del Gobierno de Canarias de destinar dicha financiación, en el marco del Programa de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible de la Dirección General de Energía de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, ha tenido en cuenta, entre otras cuestiones, la existencia de un entramado de carriles bici que fomentan la circulación de recursos móviles unipersonales, junto a la experiencia y buenos resultados obtenidos por la Sítycleta, un sistema que no ha dejado de crecer y que se ha consolidado como el medio de transporte blando favorito de miles de usuarios, donde mes a mes se baten records de uso, como la cifra alcanzada en abril con 1.144 usos diarios.
En una primera fase se estudia incorporar 320 patinetas distribuidas en 40 bases ubicadas en las zonas de mayor afluencia de la ciudad teniendo en cuenta puntos neurálgicos donde se concentra mayor movimiento ya sea por motivos laborales, de estudios o de ocio. Ramírez destacó que “queremos facilitar que las personas se unan al cambio hacia la movilidad sostenible y estamos convencidos de que esto es una oportunidad para ellos, económica, saludable, de fácil acceso y que evita acudir al vehículo privado”.
Cada estación dispondrá de 10 módulos de anclaje, ocho patinetas eléctricas y suministro eléctrico. El recurso se podrá recargar en la misma base mientras está estacionado y en un lugar de la acera donde no impide el paso de peatones o de personas con movilidad reducida. Además, se incluirán otras 40 nuevas estaciones para uso y depósito de patinetas privadas ante el creciente uso y la demanda potencial, sobre todo en puntos donde actualmente no están cubiertos.