El paro y los problemas económicos son, junto a la inmigración y la sanidad, los asuntos que más preocupan y afectan a los canarios, según la segunda oleada de 2008 del Barómetro del CES, presentada por su presidente, Fernando Redondo, y su secretario general, Carlos Varcárcel.
El contexto de crisis económica hace que los datos de esta segunda oleada del Barómetro del CES, confeccionado a partir de 2.902 encuestas realizadas entre el 27 de octubre y el 21 de noviembre a mayores de 16 años residentes en las Islas, coincidan con los recientemente difundidos por el CIS y relativos al conjunto del Estado, destacó Redondo.
El presidente del CES consideró, no obstante, que la población canaria “tiene una percepción mucho más negativa de la realidad de las Islas que la valoración que luego hace de su situación personal”.
Respecto al mercado laboral de las Islas, el paro se sitúa como el principal problema y casi la mitad de los encuestados rechaza todas las medidas propuestas para contener su incremento. Sólo dos de cada diez estarían dispuestos a renunciar a subidas salariales.
El 65% de los canarios no tiene ninguna capacidad de ahorro y han de dedicar un 5% más a los gastos del hogar, lo que obliga a reducir el gasto en ropa, calzado, ocio y alimentación.
Aunque la valoración media de la calidad de vida del lugar de residencia registra en esta segunda oleada un ligero retroceso en relación con la primera, realizada a principios de 2008, los canarios califican con 5,61, 5,50 y 5,45 puntos, en una escala de diez, la gestión del transporte público, los servicios para la tercera edad y la educación, mientras que los menos valorados son los de vivienda, la administración de Justicia, los servicios para jóvenes y los sanitarios.
En relación a éste último, los ciudadanos canarios califican con 5,81 y con 5,58 puntos el trato y la amabilidad del personal sanitario y su cualificación y formación y con un 4,06 y un 4,08 las listas de espera y la sencillez de los trámites y gestiones a realizar.
Los servicios sanitarios, la vivienda y la educación son, a juicio de los canarios, las tres áreas en las que el Gobierno canario debería invertir de forma prioritaria.
Seis de cada diez entrevistados considera que la pobreza está altamente presente en la sociedad canaria, y cuatro de cada diez señala la violencia de género como otro de los fenómenos sociales marginales destacables.
Además, aumenta de un 38 por ciento a un 44% el porcentaje de personas que tiene una opinión negativa sobre el efecto de la inmigración para Canarias, siendo los españoles y los mayores de 54 años los más críticos con su influencia para las Islas, de ahí que continúe en ascenso el porcentaje de canarios que cree que el archipiélago no necesita trabajadores inmigrantes.
Redondo recordó que los datos de este barómetro recogen las opiniones de la población, y agregó que “no tienen por qué coincidir con los estadísticos”, como ocurre, por ejemplo, cuando los encuestados, pese a la crisis alimentaria, aluden al sector primario cuando se les pregunta por las áreas que deberían desarrollarse en Canarias, además de la turística, cuya evolución futura se ve con un pesimismo creciente, para alcanzar un mayor desarrollo económico.
Los canarios siguen dando la mayor importancia a los padres y la escuela en la educación de los hijos, puntúan con un 5,88 su grado de conciliación entre vida laboral y familiar y siete de cada diez desconocen las ayudas derivadas de la Ley de Dependencia, aunque los que la conocen las valoran con seis puntos, en una escala de 10.
La salud, la familia y el trabajo son las tres cosas más importantes de la vida para los canarios, mientras que la política y la religión continúan ocupando los últimos puestos del ránking.
Fernando Redondo achacó a la crisis económica el hecho de que la valoración que hacen los encuestados tanto de la gestión que está haciendo el Gobierno de Canarias como el partido de la oposición, el PSC-PSOE, haya empeorado en relación a la que tenían a principios de año casi en la misma medida.
Así mientras la puntuación media dada a la gestión del Ejecutivo regional ha pasado del 4,24 a 3,99 puntos, la de la oposición ha bajado de 4,26 a 4 puntos.