La Audiencia de Las Palmas ha condenado a ocho años de prisión al propietario del bazar Fortuna, de la capital grancanaria, que pagaba entre nueve y 30 euros y concedías recargas gratuitas de móviles a dos menores clientes suyos, de 13 y 16 años, a cambio de favores sexuales.
Según la sentencia hecha pública este lunes, el acusado José Luis Rodríguez Quintero, de 61 años, cometió dos delitos relativos a la prostitución y a la corrupción de menores entre el verano de 2005 y marzo de 2007 en un local situado en la trasera de su estanco-bazar, donde tenía instalado un ordenador que dejó emplear en ocasiones a los dos menores para ganarse su confianza.
El acusado deberá abonar 12 euros diarios durante 24 meses y no podrá acercarse a los dos menores, a sus domicilio, lugar de estudios y frecuentados por ellos, así como intentar comunicarse con ellos por un periodo de ocho años, y deberá indemnizarles con 10.000 euros a cada uno.
Según los hechos probados, el condenado tras ganarse la confianza de los menores averiguó que necesitaban dinero para sus gastos y les convenció para que efectuaran diversos actos sexuales que pagaba en función del acto sexual solicitado y que podían ser masturbaciones, felaciones o penetraciones anales, que en dos ocasiones se efectuaron con la participación de los tres.
En alguna ocasión, el acusado puso alguna película pornográfica a los menores y los llevó a su domicilio para consumar sus deseo libidinosos.
Los dos menores han visto afectados su desarrollo personal como consecuencia de los hechos, hasta el punto de que cada vez que necesitaban dinero lo único en lo que pensaban para conseguirlo era en mantener relaciones sexuales con el acusado, indica la sentencia en los hechos probados.