El Cabildo de Gran Canaria ha abierto este viernes al tráfico de vehículos el tramo de la carretera GC-200 entre El Risco y La Aldea, que estaba cerrada por desprendimientos por las lluvias. La circulación de bicicletas, motos, peatones y guaguas de más de 8 metros sigue restringida desde Agaete hasta La Aldea.
La apertura se ha producido antes de lo previsto, la próxima semana, “gracias al trabajo y la coordinación de los equipos de conservación de carreteras”, subrayó el consejero de Obras Públicas del Cabildo, Ángel Víctor Torres.
La única carretera que continúa cerrada por las lluvias es la GC-550 entre Temisas y Santa Lucía por un importante socavón. “Seguimos trabajando en ese socavón y en otros puntos de la carretera porque incluso anoche se produjo un nuevo desprendimiento”, añadió Torres.
En cuanto a la carretera de La Aldea, ya finalizaron los trabajos de retirada de las piedras caídas a la calzada, y cuatro equipos de conservación de carreteras de las zonas oeste y norte han estado desde primera hora de este viernes trabajando en bacheos, saneos y barreras, para dejar la carretera transitable.
La retirada de la malla de protección dañada aún no ha finalizado, por lo que hay que respetar las señalizaciones y pasos alternativos mientras duren esos trabajos en altura.
El servicio de Obras Públicas del Cabildo informa de que la carretera se mantendrá abierta siempre y cuando se pueda garantizar la seguridad, y aconseja estar pendientes de las comunicaciones del Cabildo ante la previsión de lluvias a partir de esta madrugada.