El manifiesto fue leído durante una concentración en repulsa por el asesinato, en la que participaron un centenar de personas y que se celebró este martes a mediodia frente al Ayuntamiento, informó la corporación en un comunicado.
La muerte de Edelmira Cabrera Alonso “no es un acto fortuito ni aislado”, señala el manifiesto, ya que en lo que va de año 64 mujeres han fallecido víctimas de la violencia en España.
“El pueblo de Santa Úrsula y la sociedad en su conjunto entendemos la violencia hacia las mujeres como una de las mayores lacras que tiene la sociedad, puesto que es una de las más degradantes violaciones de los Derechos Humanos”, señala el manifiesto.
El área de la mujer del Ayuntamiento considera urgente “aunar esfuerzos en la lucha por la erradicación de la violencia hacia las mujeres, trabajando en pro de una educación basada en igualdad de derechos, oportunidad y respeto igualitario sin distinción de sexos”.
También reclama más protección hacia las mujeres que denuncian los malos tratos y anima a las mujeres maltratadas a que denuncien su situación y que también lo haga “el resto de la sociedad, allá donde cualquiera detecte discriminación o violencia hacia las mujeres”.
Hombre “taciturno y callado”
El presunto asesino era una persona “taciturna y callada”, aunque nadie esperaba que tuviera una reacción de este tipo, según manifestó este martes el alcalde accidental de este municipio, Juan Acosta.
El también edil de Servicios Sociales indicó que el municipio se encuentra consternado por este suceso, ocurrido anoche cuando Domingo I. M., de 61 años, presuntamente asesinó a su pareja sentimental, Edelmira C.A., de 56, tras pegarle un tiro con una escopeta de caza.
Acosta indicó que el presunto asesino es originario del municipio, mientras que la mujer, con la que convivía desde hace cuatro años y que al parecer era viuda, procedía del municipio de La Orotava.
Domingo I.M., agricultor de profesión, se pegó un tiro en la cara tras disparar contra la mujer y fue trasladado al Hospital Universitario de Canarias.
Acosta indicó que el municipio, de más de 12.800 habitantes, se encuentra consternado por el suceso, ya que es el segundo de estas características ocurrido en los dos últimos años.
El anterior ocurrió en mayo de 2005 cuando una mujer de 44 años murió apuñalada a manos de su ex novio.