El sindicato co.bas Canarias ha denunciado este viernes la sobrecarga de trabajo que lleva tiempo padeciendo el personal laboral de la Consejería de Educación ante los retrasos para cubrir vacantes. El colectivo señala que se trata de plazas prioritarias según la Ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Canarias pero actualmente las sustituciones del personal laboral de Administración y Servicios tardan “seis meses o más en cubrirse”.
“La solución de la Administración es trasladar al personal, de un centro en el que es necesario a otro centro, es decir, cambiar la necesidad de ubicación”, denuncia la portavoz del sindicato, Delia Déniz.
Señala que la consecuencia de este retraso es que las cargas de trabajo se multiplican, puesto que las personas que si están en su puesto acaban realizando la labor de los que faltan.
Según ha recogido Co.bas en sus continúas visitas a los centros escolares, se dan casos en los que un centro con hasta 1.000 alumnos tiene que ser atendido por un solo subalterno, que debe atender a toda la Comunidad Educativa (padres, madres, profesorado, alumnado), proveedores y cualquier usuario que acuda al servicio.
Además estas personas tienen que atender la centralita de teléfonos, controlar puerta y llaves, con especial cuidado de las de entrada y salida por el peligro que supone, ya que hay alumnado menor de edad...
Según subraya el sindicato, existen también auxiliares administrativos que prestan el servicio en dos centros, algunos hasta en tres, lo que supone que algunos centros tengan la Secretaría cerrada varios días a la semana por falta de personal. Los usuarios se quejan de que acuden a los centros -nadie abre la puerta, ni contesta el teléfono- y no pueden realizar sus gestiones.
“Los centros educativos tienen a su alumnado los 5 días de la semana, y el personal auxiliar administrativo es necesario los cinco días, porque realiza una función de atención humana y social con los menores y sus familias –como avisar a una familia de que un alumno está enfermo, por citar un ejemplo- más allá de los tramites puramente administrativos”, explica la portavoz.
Además, Co.bas indica que las necesidades son distintas y varían todos los días, “decir que el trabajo de un auxiliar administrativo puede concentrarse en una jornada semanal es o desconocer el funcionamiento de un centro o despreciar un servicio público esencial como es la educación”, sentencia Déniz.
Otra de las consecuencias es que muchas personas no saben en qué centro prestarán el servicio al día siguiente, porque además la comunicación se hace de un día para otro, o incluso el mismo día. El sindicato señala que , por ejemplo, sucede con los vigilantes de comedor o los ayudantes de cocina.
“Desde 2017 el Gobierno dispone de una lista renovada de miles de personas esperando a ser contratadas; estas demoras en cubrir las vacantes sólo son achacables a la mala gestión y a la desidia”, acusa la portavoz.
Para co.bas, sólo cabe recordar a la administración que “la plantilla de los centros educativos trabaja directamente con personas, la mayoría menores de edad; su labor es parte de la formación del alumnado, no son simples piezas de un ajedrez, como los trata este gobierno desde la pantalla de un ordenador”. Y exigir que, de una vez por todas, “cumplan con su labor de defender y cuidar la educación”.