Todas las islas serán escenario este jueves de manifestaciones y concentraciones en defensa de la sanidad pública, en una jornada reivindicativa denominada Marcha Blanca, en la que los sindicatos han hecho este miércoles un llamamiento a la participación masiva de la ciudadanía para atajar el deterioro del servicio sanitario.
Urgencias colapsadas, listas de espera interminables, derivación de pacientes a la sanidad privada, carencia de infraestructuras esenciales como los hospitales comarcales, recortes presupuestarios y retroceso en los derechos de los trabajadores son algunas de las características del sistema público sanitario en Canarias, que está al borde del abismo y es la ciudadanía la que tiene que implicarse para salvarlo, según Intersindical Canaria, Cemsatse, CCOO, UGT y Sepca.
Estos sindicatos han promovido un manifiesto en defensa de la sanidad pública que han suscrito CC, PSOE, NC, Podemos, IUC y ANC.
Pero “nos fiamos más de los ciudadanos” apoyando la Marcha Blanca que de los políticos cumpliendo compromisos suscritos al calor de la campaña electoral, advirtió en rueda de prensa Carmelo Jorge, de CCOO.
La intención de los sindicatos es situar en el centro de la campaña electoral el debate sobre el deterioro de la sanidad pública en Canarias, para obligar al próximo Gobierno autonómico a que la recuperación de este servicio sea “una prioridad absoluta”.
Para eso se necesita el respaldo de los ciudadanos en las manifestaciones y concentraciones que se celebrarán en las siete islas a las 18.00 horas del jueves 14 de mayo, dijo Patricia Hernández, de Intersindical Canaria.
En Santa Cruz de Tenerife, la manifestación partirá de la Plaza de Toros y en Las Palmas de Gran Canaria de la Plaza de las Ranas.
En el resto de las islas habrá concentraciones: en La Palma en la Plaza de España; en Lanzarote frente al centro de salud de Arrecife; En El Hierro frente al Hospital; en Fuerteventura en la Plaza de la Iglesia; y en La Gomera en el Paseo de Colón.
Tras la firma del manifiesto por parte de las fuerzas políticas y la celebración de la Marcha Blanca, “esperamos un cambio de rumbo” en la sanidad canaria a partir del 24 de mayo, dijo la sindicalista Patricia Hernández, quien subrayó que como mínimo se debe recuperar la calidad que existía antes de la crisis.
Carmelo Jorge enfatizó que los sindicatos han puesto de lado sus diferencias para implicar así al conjunto de la ciudadanía y al Gobierno de Canarias en la defensa de la sanidad, porque es una prioridad absoluta para todos contar con un sistema público digno.
El respaldo ciudadano ayudará a que el manifiesto firmado en campaña electoral por los partidos políticos no quede en “papel mojado”, añadió.
Los sindicatos demandan que “ningún punto de entrada” a la sanidad esté en manos privadas, en referencia a los servicios de urgencias y a la atención primaria.
La inexistencia de hospitales en el sur y en el norte de Tenerife se debe a que en esas zonas están los servicios privados, a cuyo negocio se desvía gran parte del presupuesto público, han denunciado.