El sindicato de profesores STEC ha salido al paso de los anuncios del Gobierno de Canarias sobre el incremento de plazas y colegios bilingües, ya que se califican “como plazas bilingües lo que en realidad no lo son”. Aseguran que realmente lo que hace la Administración educativa es ofertar cientos de plazas vinculadas al proyecto CLIL, que consiste en que un docente de otra materia distinta al inglés destina una hora semanal de su horario para impartir su materia en inglés, “sin incrementar las plantillas, sin negociar, y sin un estudio previo de las repercusiones que la medida provoca”.
El STEC-IC, a través de un comunicado, ha señalado que aún valorando positivamente la incorporación de medidas que redunden en la mejora del aprendizaje idiomático -del inglés- en el alumnado, “no es de recibo ni para el profesorado ni para el alumnado la forma escogida por la Consejería de Educación para la aplicación del Programa CLIL en Canarias”.
“Este proyecto CLIL en 'versión canaria', podría incluso ser calificado de arbitrario. Se ofertan como vacantes de los centros una mezcla de plazas de una misma materia, calificadas unas como ”plazas bilingües“ y otras como ”plazas normales“. (Por ejemplo: biología ”bilingüe“ y ”biología“) No hay incremento de plantillas. El número de plazas no aumenta. No existe un análisis contrastado con datos ni una evaluación de esta experiencia. Repentinamente, sin negociación previa y sin diagnóstico sobre las prioridades idiomáticas del alumnado en Canarias, aparecen en la relación de vacantes para los centros educativos cientos de plazas acogidas al programa CLIL”, han explicado desde el sindicato.
''Nada se ha hablado de los recursos“
Asimismo han apuntado que no se sabe nada de la continuidad del alumnado que se acoge a estos proyectos pues en buena parte dependerá de las optativas que tengan. “Nada se ha hablado de los recursos que dispondrán los docentes que lo imparten y que hasta ahora han estado desasistidos y abandonados por esta Administración. El número de alumnos por aula sigue en aumento, obstaculizando la viabilidad de dichos proyectos”, han reclamado.
El STEC-IC ha considerado que la aplicación improvisada del CLIL, trastocará las plantillas y los derechos de los distintos docentes. En caso de que “sobrara” profesorado, podría salir desplazado de un centro el docente con mayor antigüedad de una especialidad, porque quien se acoge al programa CLIL tiene preferencia para permanecer en el centro.
El sindicato ha subrayado finalmente dos aspectos relacionados con “la nefasta” puesta en marcha de estos proyectos europeos en Canarias: primero, “no es de recibo que este Gobierno y su Consejería califiquen de bilingüismo lo que no lo es”. Segundo, han reprochado que se desmantelen las Escuelas Oficiales de Idiomas y “estrangulen la oferta y el aprendizaje idiomático en los centros educativos públicos de Canarias”.