El grupo político Los Verdes ha pedido este viernes, “la declaración de Zona Catastrófica para los municipios de Tenerife y Gran Canaria afectados por el último incendio forestal y la puesta en marcha de manera urgente de las medidas preventivas para evitar que otro incendio similar se pueda producir”.
Basa Los Verdes su petición en que se han quemado “miles de hectáreas de bosques, además de viviendas, vehículos, fincas agrícolas, granjas e infraestructuras. Con esta medida pretenden incrementar y acelerar las ayudas económicas destinadas a corregir las nefastas consecuencias de los incendios”.
El grupo político ha calificado los recientes incendios como “un desastre ecológico y social sin precedentes en Canarias. Por lo que se requiere una actuación excepcional tendente a paliar los efectos y a sentar las bases para evitar que se repita”.
Según Los Verdes “El número de incendios forestales en Canarias es creciente con el paso de los años a pesar del aumento en personal y medios técnicos dedicados a las tareas de vigilancia y extinción.”
Afirma Rafael Rodríguez, portavoz de Los Verdes que “es necesario un mayor esfuerzo en investigar los móviles de los incendios, así como una mayor promoción de la educación ambiental que permita acabar con la permisividad ante las prácticas que suponen un riesgo de incendio forestal”.
Según el portavoz de Los Verdes “Cabildos y Ayuntamiento deben hacer cumplir la vigente obligatoriedad de realizar planes de autoprotección de infraestructuras y equipamientos y favorecer la implicación en la lucha contra los incendios a particulares e instituciones”,
Continúa Rodríguez afirmando que “Si bien somos optimistas sobre la recuperación de la mayor parte de las zonas forestales afectadas, no podemos serlo en cuanto a los árboles frutales, palmerales y otras formaciones vegetales afectadas por los incendios. Pero lo que desde luego es irrecuperable, si no se dan las ayudas necesarias desde la administración, son las numerosas fincas afectadas, cuyos animales, cultivos, sistemas de riego e infraestructuras han sido pastos de la llamas”.
Concluye el portavoz reiterando que “la mejor forma de evitar los incendios forestales es con la prevención, favoreciendo el mantenimiento en las cumbres y medianías de las actividades agrícolas y ganaderas y recuperando las fincas abandonadas, que se convierten en auténticos polvorines”.