María del Carmen Castellano (Las Palmas de Gran Canaria, 1967) lee actualmente Dispara, yo ya estoy muerto(Julia Navarro, 2013), un libro que arranca con la frase “hay momentos en la vida en los que la única manera de salvarse uno mismo es muriendo o matando”.
Llegó a la política por casualidad: “me fueron a buscar de parte de don Alejandro Castro, que en aquellos momentos era consejero del cabildo”, pero “nunca pensé estar en cargos políticos”. Promete que siempre estará del lado del Partido Popular, que decidirá si se presenta o no a las próximas elecciones. Ya ha conseguido su mayor ambición política: presidir el consistorio teldense.
Deuda
La abogada de profesión llegó como regidora al Ayuntamiento de Telde el 11 de junio de 2011 y tenía que haberse encontrado con “un superávit de 795.000 euros”, según ha dicho, aunque más tarde comprobaría que el gobierno saliente estaba “a un paso de la quiebra técnica, (con) un déficit de casi 5.000.000 de euros”.
Por ello, presume de haber pagado en dos años casi 30 de los 44 millones de euros contraídos en el mandato anterior. “Seguimos siendo uno de los municipios mas endeudados de España, pero estamos cumpliendo con todos los pagos”, asegura.
Caso Faycán
A pesar de que la Fiscalía ha pedido para ella 5 años de cárcel por el caso Faycán, María del Carmen Castellano no pierde el sueño ni se ve en prisión, manifestando que “yo sé que no hay absolutamente ninguna prueba, porque yo no he cometido ningún delito”, y añadiendo que “yo no he engañado a nadie”, en relación al conocimiento de su imputación cuando se presentó como candidata a la alcaldía.
Lleva esperando casi una década por una resolución judicial, lo que hace que se sienta “frustrada”, aunque admite que “es un peso al que yo me he acostumbrado a vivir con él, no solo en lo político, también en lo personal”. El “daño es irreparable”, pero lo único que no le permite dormir es el estado de salud de sus padres.
La Casa de la Condesa
“Es difícil que nosotros podamos pagar facturas a una empresa que dice que nos está asegurando y controlando que no entren a robar, y que día a día veamos que la Casa de la Condesa siga sufriendo robos”. La alcaldesa ha resuelto “defender los intereses de la ciudad de Telde y no los de ningún particular; aquí hay una empresa que ha incumplido con lo que nosotros tenemos y vamos a seguir adelante con todos los trámites que tengamos que seguir”, anuncia con respecto a Seguridad Integral Canaria, propiedad de Miguel Ángel Ramírez.
Su objetivo es convertir el edificio, antes de que finalice 2014, en un centro que agrupe las actividades culturales y de ocio de Jinámar, con un servicio de vigilancia.
Gestel
“Los trabajadores pedían que cambiáramos el orden de prelación de pagos y yo no lo puedo hacer, porque la ley tiene establecido primero los préstamos, después la Seguridad Social, después las nóminas”. A pesar de la huelga indefinida que desarrolla parte de los más de 30 empleados de Gestel, Castellano explica que hace todo lo que está a su alcance.
Considera a la empresa “un proveedor del ayuntamiento” y augura que “ahora vamos a tener una estabilidad”, habiendo eliminado la Universidad Popular y asumiendo sus funciones la Concejalía de Educación, con el objetivo de generar facturas que puedan ser pagadas y buscar así una solvencia económica para la entidad.
La regidora municipal se felicita de haber reducido el tiempo de cobro de los proveedores de 1.089 días a 3, 4 y 5 meses.
En lo personal
A María del Carmen Castellano le gusta caminar por la playa, leer y cocinar. Su comida favorita es el arroz al horno. Es madre, acude al gimnasio y tiene un gato llamado Huecco, “como el cantante”. En cuanto a la música, escucha a Merche y Alejandro Sanz.