El Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Los Cristianos, en Arona (sur de Tenerife), ha vivido dos años plagados de conflictividad laboral que han acabado con la marcha de más de cincuenta profesores con plaza definitiva en el centro, un total de 78 bajas laborales y la suspensión temporal de la directora del instituto, Samira Tela, por orden de la Dirección General de Personal y Formación del Profesorado del Gobierno de Canarias, según ha podido saber este periódico.
A finales de agosto, este órgano directivo, adscrito a la Consejería de Educación del Ejecutivo regional, acordó incoar un procedimiento disciplinario a Tela tras tener conocimiento de “una serie de incidentes” ocurridos en el IES Los Cristianos en los cursos 22/23 y 23/24 en los que ella fue directora del centro. Con la apertura del expediente también se determinó suspenderla de sus funciones provisionalmente.
La dirección general citada señala que Tela habría podido incurrir en la comisión de dos faltas disciplinarias muy graves, estas son, acoso moral y obstaculización al ejercicio de las libertades públicas y derechos sindicales, y otras dos faltas graves, abuso de autoridad en el ejercicio del cargo y grave desconsideración de los superiores, compañeros o subordinados.
Tela, por su parte, defiende en declaraciones a Canarias Ahora que los hechos que se le imputan “no son ciertos” y que “así se acreditará en la instancia judicial oportuna”. Fuentes de la Consejería de Educación agregan que la medida cautelar de suspensión fue recurrida dos veces y que en ambas ocasiones se mantuvo, en la segunda de ellas, incluso, con informe del instructor. Esas mismas fuentes detallan que desde 2020 se han incoado cien expedientes disciplinarios a personal docente en Canarias, pero solo en 14 se ha procedido a su vez con la suspensión de funciones como medida cautelar.
La decisión de expedientar a la directora de este instituto público provino directamente de la Dirección General de Personal y Formación de Profesorado a partir de “diversos escritos” que tuvieron entrada en su registro criticando la gestión de Tela y su trato hacia compañeros y alumnos.
El decreto que regula el funcionamiento de la Consejería de Educación permite que órganos superiores tomen este tipo de decisiones. En este caso, no hay mención alguna de informes previos de la inspección educativa que motivaran la apertura del expediente. La fase de instrucción del mismo sí está siendo llevada a cabo por inspectores.
Entre los escritos recogidos, algunos de ellos vistos por esta redacción, es relatado que Tela ha mantenido “enfrentamientos con varios docentes que conllevan la situación de baja médica durante el resto del curso escolar”, haciendo alusión a “presuntos casos de acoso y malas formas”.
Una profesora que trabajó en el IES Los Cristianos y que accede a hablar bajo anonimato explica que Tela protagonizó un “cambio de actitud tremendo” en el momento en que accedió a la dirección del centro “pese a que ya había estado” muchos años en el equipo directivo anterior como secretaria y contaba con más de dos décadas de experiencia en el instituto, según informó el propio periódico escolar.
Esta fuente afirma que Tela “se tomó el instituto como si fuera su cortijo particular” y que “su actitud era muy hostil hacia todo el profesorado”. Agrega que “daba igual que fuera profesor, personal no docente, la gente de administración…”, las personas que entraban a su despacho “salían llorando, literalmente”. “Ella decía que se había acabado el no trabajar. (…) Empezó a instalarse un miedo a que te llamaran la atención en público, a que te pusieran en evidencia”, continúa.
Otra docente que también prefiere no revelar su identidad sostiene que la experiencia de trabajar con Tela fue “nefasta” y que tuvo una baja médica que se le “alargó muchísimo a raíz de la tensión” que sufría. Un profesor, por otro lado, asevera que la directora llegó a entrar a su clase y pidió al alumnado que transmitiera sus “quejas” hacia él con la intención de “quitarle su autoridad”. Cuenta que después de eso salió corriendo del instituto entre lágrimas, y que no regresó.
“No puedo enseñar con miedo”, escribió en una carta. “Hay desconfianza y se está optando por pasar o irse del centro. Mentalmente no puedo más. He pedido la baja, pero como profesor en el instituto para poder rehacer mi vida en otra comunidad autónoma”, añadió.
La Dirección General de Personal y Formación del Profesorado ha registrado que, de un total de 56 funcionarios de carrera con destino definitivo en el centro en el curso 22/23, 41 docentes decidieron abandonar. Ese año, de los 103 profesores con destino provisional, 46 también pidieron cambiar de instituto. Además, hubo cuatro jubilaciones voluntarias y una renuncia, también voluntaria.
El curso siguiente, los datos de salida de profesores decrecen, pero continúan siendo elevados. De un total de 39 funcionarios con destino definitivo en el IES Los Cristianos, dieciocho se marcharon. También había 64 profesores temporales con derecho a prórroga, pero catorce prefirieron no continuar. En ambos cursos hubo 78 bajas laborales, al menos dieciocho de ellas de mínimo cien días de duración. En estos momentos, el centro tiene 98 docentes y casi mil alumnos.
A pesar de que la medida cautelar de suspensión solo se ha tomado en tres de los treinta procedimientos disciplinarios abiertos contra personal docente en 2024, la dirección general mencionada justifica la decisión en este caso “vista la gravedad de los hechos que se imputan” a Tela, de los que presuntamente han podido ser víctimas “no solo el personal del centro, sino también alumnado menor de edad”.
Esos incidentes se remontan al 21 de septiembre de 2023. Ese día, Tela acudió a hablar con la clase de Enseñanzas Deportivas de Salvamento y Socorrismo y les pidió que “firmaran un folio en blanco coaccionándolos para que permanecieran en el turno de mañana y no en el de tarde”, según un escrito de una madre de uno de los estudiantes.
Los alumnos se negaron a firmarlo, continúa ese documento, pero es entonces cuando “se produce [un] enfrentamiento” entre ellos y la directora que acabó con uno de los estudiantes en el despacho de esta última. Allí estuvo desde las 14:30 hasta las 16:17, de acuerdo con otro texto en poder de la Consejería de Educación, “no permitiéndose su salida” hasta “firmar un documento que el menor no quería ante la amenaza de expulsión del centro por 10 días”
El profesor de ese grupo escolar aseguró en una misiva que Tela había “irrumpido tanto en las aulas como en la piscina, alzando la voz y dirigiéndose de manera inadecuada al alumnado y al profesorado”. También dijo que la directora acudió un día al aula en la que él estaba impartiendo clases, le entregó documentación y posteriormente decidió quedarse en la sala, interrumpiendo con frases como “te estás inventando lo que estás haciendo” y “los profesores de los ciclos de las enseñanzas deportivas trabajan menos horas que el resto del profesorado y eso no lo voy a permitir”.
Ese docente relató que desde que comenzó el curso, tanto él como el alumnado habían estado “sufriendo continuas faltas de respeto” y que llegó a encontrarse “en tal estado de nerviosismo y ansiedad” que tuvo que acudir a urgencias, donde le indicaron que “sería recomendable una baja por incapacidad temporal”. Envió esa carta a la Dirección Territorial de Educación de Santa Cruz de Tenerife.
Dos de las fuentes consultadas reiteran que el IES Los Cristianos era un centro familiar, con un claustro “muy estable”. Una de las fuentes asegura que llevaba catorce años trabajando en el instituto pese a residir en Santa Cruz de Tenerife, por lo que tardaba casi una hora en llegar en coche. El anterior director del centro, Rafael del Cristo, obtuvo en marzo de 2023 una distinción Viera y Clavijo del Gobierno de Canarias por su “trayectoria, dedicación e innovación pedagógica”.
El procedimiento disciplinario contra Tela continúa en fase de instrucción. La suspensión provisional acordada a finales de agosto tiene una duración máxima de seis meses.