El consejero de Educación del Gobierno de Canarias, Poli Suárez, ha afirmado este miércoles que no tiene un informe que avale la denuncia hecha por el CEO Bethencourt y Molina al Diputado del Común en la que se alerta del aumento de “problemas graves” de salud mental entre los jóvenes tras la pandemia, “incluso entre niños de primaria”.
El Diputado del Común, Rafael Yanes, se reunió con miembros de la comunidad educativa del CEO Bethencourt y Molina de Santa Cruz de Tenerife, quienes han pedido recursos específicos para abordar las necesidades psicológicas del alumnado dado que la situación de la salud mental es una “emergencia social”.
La directora del centro, María José Zamorín, explica que el aumento de menores que sufren problemas de salud mental tras la pandemia es “alarmante, con clases de Primaria en las que todos los alumnos padecen problemas psíquicos''.
Poli Suarez, en declaraciones a Efe, ha manifestado que es “rotundamente incierto” que haya grupos enteros de primaria en las islas con problemas de salud mental, pues esto “no está avalado por ningún informe ni estudio”.
El consejero ha asegurado que “no hay emergencia social en Canarias de salud mental en el alumnado”, al tiempo que le ha pedido a la directora del centro ubicado en Santa Cruz de Tenerife que le traslade toda la información a la Consejería para poder tomar una decisión.
En este sentido, ha criticado que es “irresponsable” que la directora del CEO haga estas afirmaciones públicas “sin informe ni rigor” y que se haya saltado todos los protocolos de la Consejería al acudir antes al Diputado del Común antes que a inspección o a la propia Consejería.
“Nos parece arriesgado asegurar sin datos que su estado es peor que otras regiones o antes de la pandemia”, ha manifestado el consejero, quien ha insistido en que las consejerías de Educación y Sanidad trabajan de forma conjunta en este sentido.