Espacio de opinión de Tenerife Ahora
Oro, incienso, piche y una carretera
¿Se acuerdan de los tres Reyes Magos que llevaron de regalo al Niño Jesús oro, incienso y mirra cuando fueron a visitarlo recién nacido, verdad? Pues a pesar de que no estamos en fechas navideñas sino en abril, esta semana me he acordado de ellos y de su bonito presente, aunque en esta ocasión con la ministra de Fomento como protagonista y con unos regalos nada agradables: descoordinación, incompetencia, piche… ¡ah! y dinero para una carretera nueva. ¡Vaya, qué sorpresa! ¿De verdad ha prometido20 ó 30 millones de euros para cofinanciar esta vía grancanaria tan necesaria que conecta con La Aldea de San Nicolás? ¿Justo en este momento? ¿Será que además en un mes hay elecciones y no nos hemos enterado?
Claro, debe ser queel Gobierno estatal, que sabe que ha metido la pata hasta el fondo con la forma en que desde Capitanía Marítima de Las Palmas, dependiente del Ministerio de Fomento, se ha gestionado la crisis del barco ruso Oleg Naydenov, quiere ahora darnos el caramelito para consolarnos. Parece mentira que tengan que suceder desgracias como esta como para que infraestructuras tan necesarias para las Islas como esta carretera tengan apoyo económico del ministerio competente.
No salgo de mi asombro con el anuncio de Ana Pastor, que viene a reunirse con las autoridades locales para visitar la costa sur de Gran Canaria afectada por el vertido de fuel, y ya que el Pisuerga pasa por Valladolid pues promete unos millones para la tan ansiada vía. Así desvían un poco la atención, ¿no?
Del terrible desastre que ocasionó el Prestige en la costa gallega no han pasado tantos años; parece que no aprendimos nada de los errores garrafales que se cometieron en aquel momento y que provocaron una de las mayores catástrofes medioambientales del país. La incompetencia y la descoordinación vuelven a formar parte del ADN de algunos de nuestros gobernantes, pero claro, nos compensan con carreteras, ¡qué bien!
No hay que serun gran especialista para entender que al Naydenov tenían que haberlo aislado dentro del puerto de Las Palmas y sofocar sus llamas con espuma de alta densidad en lugar de agua salada, tal y como han explicado algunos expertos en seguridad marítima estos días. Un vertido de fuel siempre será menos perjudicial en una zona controlada que en mar abierto.
Pero este episodio lamentable no nos libra en las Islas de poder sufrir otros posibles derrames más graves, procedentes de algunos de los petroleros que atraviesan con cierta asiduidad nuestras aguas en su ruta habitual para trasladar el crudo a sus lugares de destino. Y lo peor es que Canarias no tienemedios para afrontar una situación de este tipo, ni parece que los tenga el Estado, visto lo visto, que es quien tiene las competencias en nuestras aguas interiores, con lo quecualquier buque en casi cualquier condición puede navegar por esta zonasin que podamos decir nada aquí.
Triste también la gestión que se ha hecho de esta crisis desde Fomento, que no para de dar una mala imagen para las Islas. Así que puestos en esta oportunista clave electoral, tal vez sería más efectivo que invirtieran en limpiar nuestras playas de tanto piche que se acumula en la arena y en los callaos de buena parte de nuestras costas, en las que, por cierto, tampoco tenemos competencias. Puede que de esta forma hasta consigan más votos.
¿Se acuerdan de los tres Reyes Magos que llevaron de regalo al Niño Jesús oro, incienso y mirra cuando fueron a visitarlo recién nacido, verdad? Pues a pesar de que no estamos en fechas navideñas sino en abril, esta semana me he acordado de ellos y de su bonito presente, aunque en esta ocasión con la ministra de Fomento como protagonista y con unos regalos nada agradables: descoordinación, incompetencia, piche… ¡ah! y dinero para una carretera nueva. ¡Vaya, qué sorpresa! ¿De verdad ha prometido20 ó 30 millones de euros para cofinanciar esta vía grancanaria tan necesaria que conecta con La Aldea de San Nicolás? ¿Justo en este momento? ¿Será que además en un mes hay elecciones y no nos hemos enterado?
Claro, debe ser queel Gobierno estatal, que sabe que ha metido la pata hasta el fondo con la forma en que desde Capitanía Marítima de Las Palmas, dependiente del Ministerio de Fomento, se ha gestionado la crisis del barco ruso Oleg Naydenov, quiere ahora darnos el caramelito para consolarnos. Parece mentira que tengan que suceder desgracias como esta como para que infraestructuras tan necesarias para las Islas como esta carretera tengan apoyo económico del ministerio competente.