Por qué la COVID-19 sigue expandiéndose por Tenerife pese a ser la Isla con las restricciones más severas y prolongadas

Natalia G. Vargas

Santa Cruz de Tenerife —
20 de noviembre de 2020 19:08 h

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Tenerife es la isla que ha aplicado las restricciones más estrictas contra la COVID-19 y también durante más tiempo de todo el Archipiélago. Pero el virus sigue propagándose por el territorio. Después de casi dos meses, la Consejería de Sanidad ha anunciado que Tenerife sigue sin poder salir del semáforo rojo y las restricciones propias de esta limitación permanecerán vigentes hasta el próximo 4 de diciembre. La alta concentración de casos de COVID-19 por cada 100.000 habitantes que mantiene la Isla desde el 23 de septiembre ha provocado que sea la única del Archipiélago que aún no ha está en semáforo verde. A las medidas sanitarias que se aplican en el marco de este método se suman las que el Gobierno de Canarias implantó el pasado 12 de noviembre. Los contagios diarios no caen, pero desde la Consejería aseguran que los datos globales marcan una tendencia a la estabilización y a la baja. Pese a que aún quedan días para que la curva baje, las cifras son esperanzadoras. Por ello, el área que dirige el consejero Blas Trujillo anima a la población a que siga adhiriéndose a las normas porque “el sacrificio da resultados”.

¿Por qué la enfermedad sigue expandiéndose por Tenerife pese a dos meses de duras restricciones? El epidemiólogo y presidente de la Asociación Española de Vacunología, Amós García, responde con contundencia: “Si hay casos es porque hay contagios. Si hay contagios es porque sigue habiendo reuniones sin medidas de protección”. Desde su punto de vista, además de la responsabilidad social de la población, las autoridades deben aumentar la vigilancia e imponer más sanciones. “Si la gente ve que los actos irresponsables se castigan, cambiarán sus comportamientos”, apunta.

Respecto a la necesidad de restringir la movilidad en el territorio, García sostiene que es importante esperar a la próxima semana para conocer los resultados de las limitaciones impuestas por el Ejecutivo regional, aunque “todas las medidas deben estar sobre la mesa”. El epidemiólogo ha matizado que para sacar conclusiones científicas sobre el comportamiento del virus será necesario esperar a que finalice la pandemia.

Este viernes, 20 de noviembre, Tenerife ha sumado 86 nuevos contagios y ha lamentado un nuevo fallecimiento. En este momento, la isla cuenta con 2.495 casos activos y acumula 8.077 contagios desde que estalló la pandemia. Desde marzo, 172 han muerto en Tenerife por el virus.

La Incidencia Acumulada de los últimos 14 días es de 133 casos por 100.000 habitantes, una cifra que aún dista de los valores recomendados por el Ministerio de Sanidad para poder entrar en la “nueva normalidad”. Por otra parte, la IA de los últimos siete días se sitúa en 65.5.

El Gobierno de Canarias implantó más restricciones adicionales a las del semáforo rojo en Tenerife para frenar la propagación de la COVID-19 desde el pasado 12 de noviembre y los ayuntamientos de Santa Cruz de Tenerife y La Laguna han tratado de aumentar los controles, cerrando parques, canchas o espacios públicos e incluso se han coordinado en los últimos días para aplazar las competiciones deportivas al menos durante las próximas dos semanas.

La imposición de sanciones no ha cesado. La Guardia Civil ha puesto en los últimos siete Daisis más de 120 denuncias por incumplimiento de las medidas sanitarias, como el uso de mascarilla, la distancia personal o el aforo máximo de personas en reuniones públicas y privadas.

En la última semana, Sanidad ha contabilizado 29 nuevos brotes de COVID-19 en la última semana. La mayoría de los contagios han tenido lugar en entornos sociales y laborales, pero además tienen ramificación en el ámbito familiar. La isla concentró el segundo y el tercer brote más numeroso del Archipiélago, con 18 y 13 personas afectadas respectivamente.

Asimismo, dos brotes se localizan en el Hospital Universitario de La Candelaria, donde se han visto afectados en total siete trabajadores y tres familiares.