CC, PSOE y PP rechazaron este lunes en el pleno del Cabildo de Tenerife una moción de Podemos en la que se proponía reconsiderar la introducción del gas en Tenerife, al entender esos partidos que es una apuesta estratégica para la isla como combustible de transición más económico y menos contaminante hasta que se consiga que la generación de electricidad sea al 100% de fuentes renovables.
La moción de Podemos fue defendida por el consejero Fernando Sabaté, quien aseguró que la introducción del gas en la isla y la necesidad de amortizar esa industria va a bloquear la penetración de las energías renovables.
“Estamos apostando por el neolítico, y es mentira que el gas sea más limpio, pues produce en todo su ciclo de vida emisiones de metano, cuyo efecto sobre el cambio climático es 86 veces mayor que el dióxido de carbono”, afirmó Sabaté.
Reprochó a los defensores del gas en Tenerife su “obsesión por buscar mercados” a ese combustible, ante las dudas sobre su viabilidad económica y la posibilidad de que Endesa renuncie a comprarlo al ser cada vez más barato abastecerse con energías renovables (80 euros por kilovatio/hora frente a 190 euros el gas).
“En lugar de estar promoviendo la instalación de placas fotovoltaicas en todas las azoteas” y apostar por una gestión eléctrica distribuida se consolidan oligopolios, se quejó el consejero de Podemos, quien recordó que la apuesta por el gas se hizo en 1988, cuando la alternativa era solo el carbón, no las energías renovables como hasta ahora.
La inversión para la planta regasificadora será de un mínimo de 192 millones de euros y eso supone que habrá que asegurar el negocio en perjuicio de la promoción de las energías renovables, afirmó, Sabaté, quien también alertó sobre la dependencia del suministro de países como Argelia, Nigeria, Egipto y Libia.
El director insular de Fomento, Miguel Becerra, defendió la apuesta del Cabildo por las energías renovables, en las que la Corporación ha invertido 340 millones de euros.
“Todos queremos el máximo porcentaje de energías renovables, pero el debate es si es el gas o el diesel el combustible que va a acompañar a las energías limpias en los años necesarios para su implantación”, dijo. Al respecto, indicó que el gas supone un ahorro de 100 millones de euros anuales en la generación de energía eléctrica frente al diesel.
Manuel Fernández, del PP, también aseguró que el futuro son las energías renovables, pero, mientras no se llegue al escenario del 100% de energías limpias, hay que decidir si se utiliza el diesel o el gas, que es “el combustible fósil más limpio”, sostuvo.
El gas no genera azufre y reduce el 30% la emisión de dióxido de carbono en Tenerife, un millón de toneladas al año, aseguró. También dijo que, junto al ahorro en la producción de energía de 100 millones de euros anuales, permitirá ahorros para la industria.