La plantilla del tranvía de Tenerife, una empresa del Cabildo llamada Metropolitano de Tenerife, SA, ha presentado un preaviso de huelga “de largo recorrido” a partir del 9 de noviembre, viernes, en protesta por las “penosas” jornadas laborales que padecen sus trabajadores, en las que, a juicio de estos, no se respetan horarios ni descansos, cuestiones de mejora laboral que se pueden atender con la contratación de unos 20 empleados más.
La protesta ha sido respaldada por 124 de los 171 trabajadores de Metropolitano de Tenerife y por su comité de empresa, integrado por CCOO, UGT e Intersindical Canaria, que ha expresado su disposición a llegar a los acuerdos oportunos con la entidad, la Dirección General de Trabajo y el Cabildo de Tenerife, con el fin de poder evitar el paro.
En una rueda de prensa, el secretario de Organización de la Federación de Servicios Públicos de CCOO en las islas, Juan Miguel Suárez, señaló que el masivo apoyo a la huelga muestra el malestar de la plantilla de Metropolitano “ante las largas penalidades que sufren” y el recorte de derechos laborales, que implica sobrecarga y tensión.
Luis Marrero, presidente del comité de empresa, puntualizó que los trabajadores del tranvía “no llevamos tomates ni lechugas”, y recordó que este transporte actualmente es utilizado por unas 60.000 personas al día y la sobrecarga laboral puede afectar a la seguridad.
Juan Miguel Suárez indicó que no reclaman un incremento de salario sino que se desbloqueen las negociaciones del convenio colectivo, que se encuentran paralizadas desde hace un año, y también que se solventen “las reiteradas infracciones e incumplimientos” del Estatuto de los Trabajadores y del convenio colectivo en vigor.
Al respecto, detalló Luis Marrero que se han presentado demandas ante la Inspección de Trabajo y esta ha resuelto que Metropolitano de Tenerife ha cometido infracciones graves al omitir el derecho al descanso de los trabajadores y no respetar turnos, horas extraordinarias, nocturnas, la duración de la jornada, permisos y vacaciones.
En concreto, la plantilla denuncia que, aunque su jornada es de 37,5 horas semanales, los conductores ven cómo se excede su horario en la práctica hasta incluso llegar a las tres horas extras, que no se compensan ni en descanso ni en remuneraciones posteriormente.
Además, cuando se refuerza el servicio del tranvía por eventos públicos en Santa Cruz de Tenerife y La Laguna se llama a trabajadores que tienen día de descanso para que se incorporen al servicio, de tal manera que hay empleados que acumulan hasta nueve días seguidos de trabajo, afirman.