- Película: El hilo invisible (Phantom Thread), 2017
- Director: Paul Thomas Anderson
- Reparto: Daniel Day Lewis, Vicky Krieps, Lesley Manville, Bern Collaco, Jane Perry, Richard Graham, Camila Rutherford, Dave Simon
El cine de Paul Thomas Anderson no te deja indiferente, te hace sentir un poco incómodo, te hace pensar y revolverte en la butaca del cine. Ya lo hizo sobre todo con Magnolia, y también con Boogie Nights o Pozos de ambición. En su último trabajo, El hilo invisible, se tiene esa sensación, pero la distancia que marca con el espectador es mucho mayor: la frialdad que transmite hace que esta historia de amor, pasión y degradación no te afecte lo más mínimo.
La cinta narra la excéntrica y maniática vida de Reynolds Woodcock, un modista de la clase alta de los años cincuenta cuyo único sentido en su vida son los trajes que confecciona. Esta rutinaria y organizada vida se rompe al conocer a Alma, la que será su musa y compañera, con todas sus consecuencias. El trío lo cierra la hermana del modista, figura indispensable para poder mantener esta historia.
Que la película resulte exquisitamente distante no significa que no sea un buen filme. Es una cinta elegante, con una fotografía llevada al mínimo detalle por el propio Paul Thomas Anderson, con una cadencia y un ritmo perfecto, que le da a cada momento la importancia necesaria. Y todo esto envuelto en una magnífica banda sonora de Jonny Greenwood, que opta a la deseada estatuilla de Hollywood.
Pero si la estética es fundamental en la obra del director norteamericano, imprescindible es la presencia de sus tres actores principales. Para empezar, hay que nombrar a la británica Lesley Manville (Una cita en el parque, Maléfica), nominada al Oscar por este papel de hermana complaciente, cómplice y aparentemente distante. Actriz encasillada en papeles secundarios, en esta actuación su figura casi imperturbable transmite todo tipo de sensaciones dignas de esta nominación a los premios de la academia. Por su parte, Vicky Krieps (Colonia, Antes del frío invierno) interpreta a la perfección esa dulzura de la inocencia absoluta que poco a poco se va transformando en una madurez sibilina y distante.
Mención especial, por supuesto, para Daniel Day Lewis. El actor inglés realiza un trabajo fantástico y lleno de matices dando vida a la figura de este maniático y egocéntrico modista de los años cincuenta. Un complejísimo personaje repleto de dobleces, tanto en sus vestidos, llenos de mensajes en su interior, como en lo profundo de su alma. Un papel perfecto para este gran actor que ha anunciado su retirada tras este trabajo.
Hay quien califica El hilo invisible de obra maestra. No es mi caso. Me gustó, la disfruté pero no me emocionó, no me llegó, algo que no puede faltar en una película donde la pasión y el drama marcan el ritmo de la historia.