La escritora Julia Navarro, que ha presentado su último libro, Tú no matarás, en la Feria del Libro de Tenerife, afirma que en Europa “no hemos aprendido la lección del siglo pasado” y considera que la política europea es un espectáculo “desolador” con el auge de xenófobos y populistas.
Navarro, en una entrevista con Efe, indica que el peso de la conciencia, la venganza y la propia condición humana entran a debate en Tú no matarás, donde se narra el futuro incierto de tres jóvenes, Fernando, Eulogio y Catalina, tras la Guerra Civil española.
La también periodista señala que todos sus libros narran “la indagación de la condición humana”, lo que la escritora ha considerado como “el último misterio que hay en el planeta”.
Asimismo, la novelista ha destacado que, al igual que sucede en el resto de sus historias, Tú no matarás transcurre durante el siglo XX, una época “muy violenta” en la que acontecen algunos de los momentos más importantes para humanidad.
A pesar de que este tipo de situaciones no se han vuelto a repetir en el entorno europeo, Navarro considera que la actualidad política europea es “un espectáculo desolador”: estamos “presenciado el auge de partidos xenófobos y populismos” y “no hemos aprendido la lección del siglo pasado”, ha expuesto.
La escritora ha lamentado especialmente el auge de la extrema derecha en zonas como Alemania, Italia y España, y ha subrayado que la inmigración, tema recurrente en muchas de sus obras, es un problema que le “preocupa”.
“Ojalá no fuera verdad” el refrán que dice que “el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra”, ha señalado Navarro en relación con la cuestión migratoria.
Tú no matarás se centra en el desarrollo personal de los tres protagonistas a los que la Guerra Civil y el franquismo “roban su futuro”, entre ellos, Navarro ha señalado la aventura de Catalina, una madre soltera del bando vencedor a la vez víctima de los “códigos sociales de un periodo terrible y siniestro”, en referencia a los años de la dictadura.
“Catalina es una mujer que no tiene futuro, nadie quiere casarse ni tener una familia con ella”, ha dicho la escritora, quien ha apuntado que “afortunadamente” la España actual permite a las mujeres decidir sobre la maternidad, si bien es cierto que “esto no sucede en otros países”.
En busca de encontrar un porvenir más esperanzador, Fernando, Catalina y Eulogio se mueven de un Madrid devastado por la contienda a una Alejandría “abierta, global y en la que podía suceder cualquier cosa”.
Esa Alejandría que, según la escritora es una “licencia literaria”, ya que el exilio español no se dirigió a Egipto.
“Tengo un amor especial por esta ciudad”, ha confesado la novelista, quien se enamoró de la urbe egipcia “por culpa” de los libros de Lawrence Durrell y de Edward Forster, y a partir de ahí, Navarro decidió “que siempre iba a mirar hacia esa ciudad con los ojos de la literatura”.
Algo que podrá hacer durante toda su vida tras haber visitado la prestigiosa Biblioteca de Alejandría y haber dejado allí varios ejemplares de Tú no matarás.
Navarro contesta a esta entrevista en el marco de la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife, una provincia que pertenece a la segunda comunidad que menos lee de toda España.
“La lectura hay que incentivarla desde el colegio”, ha indicado la escritora, quien aboga por “fomentar el amor a las letras desde niños” y por solucionar “los problemas de comprensión lectora” con los que llegan los alumnos a Bachillerato y a la universidad.
“Tengo la impresión de que la lectura y las humanidades están desapareciendo de los planes de estudio” y estas son la herramientas que Navarro considera necesarias “para ser ciudadanos críticos”.
“Cuando en las aulas desaparecen la lectura y el arte, estamos creando una sociedad cada vez más manipulable”, ha implorado la novelista.
Navarro seguirá durante todo el año promocionando su ficción Tú no matarás, que en octubre estará disponible en lengua inglesa y se presentará en Estados Unidos.
La escritora está trabajando en una nueva historia, pero ha dejado claro que no avanzará nada del contenido. Nunca cuenta lo que está escribiendo, “ni siquiera a mi editor”, ha manifestado la escritora, que prefiere compartir su imaginación solo a través del papel.