El Iberostar Tenerife afronta un partido este domingo, en San Sebastián, vital para intentar seguir con opciones de jugar el “play-off” por el título de Liga, pero ante un adversario, el Guipozcoa Basket, que también se la juega debido a su mala situación clasificatoria.
El partido tiene todos los ingredientes para que se pueda ver un gran duelo, dos conjuntos necesitados, dos equipos con mucha ambición y un cuadro lagunero que, después de pasar por un bache en el juego, ya se ha encontrado con su mejor versión y está dispuesto en estas últimas jornadas a demostrar la calidad de su plantilla.
El conjunto de Alejandro Martínez tratará de superar otra de las barreras esta temporada, ya que el plantel insular nunca ha ganado en Illumbre e intentará aprovechar ahora ante un adversario que lleva seis partidos sin ganar y acosado por la presión que existe estar situado en zona de descenso, más aún cuando el Manresa viene de ganar y los iguala a victorias.
Alejandro Martínez dispondrá de la totalidad de su plantilla, un equipo que va a más y que tiene ese gran objetivo de intentar colarse entre los ocho primeros y así disputar, por primera vez en su historia, el play-off por el título.
Pero ese es un objetivo muy ambicioso y aún muy complicado por la presión que está poniendo el Herbalife Gran Canaria, el CAI Zaragoza o el propio UCAM Murcia, que también buscan lo mismo.
El Iberostar Tenerife mañana debe pensar en si mismo, en la obligación de seguir sumando triunfos y en que sus jugadores sigan creciendo individualmente y como grupo, como es el caso del pívot Xavi Rey, que cada vez aporta más al grupo y permite rotaciones de calidad en el juego interior.
De resto, el equipo debe seguir jugando con esa frescura ofensiva y esa tensión que están poniendo en defensa, una tensión que debe ir unida con intensidad y así hacerse un grupo compacto.
Hay que recordar también que el Iberostar Tenerife cuenta con catorce triunfos, uno menos que Herbalife Gran Canaria (octavo) y CAI Zaragoza (noveno), pero los laguneros disponen de un partido menos, ese choque que se aplazó frente al Gran canaria y que se jugará el próximo jueves 7 de mayo en el pabellón Insular Santiago Martín.
Es por ello lo importante de ganar en San Sebastián y llegar a ese partido con las máximas opciones de triunfo.
Por su parte, el Gipuzkoa Basket afronta con la visita del Iberostar Tenerife uno de sus partidos más importante de la temporada ya que de no ganar igualaría en el final de la Liga Endesa con Bruixa D’Or Manresa en puestos de descenso.
Es una jornada clave porque, al enfrentarse cuatro de los cinco últimos clasificados entre ellos, los de San Sebastián tienen una inmejorable opción para dejar encarrilada la permanencia si no fallan.
Los donostiarras acuden a este partido en su peor momento, acumulan una racha de seis derrotas y las sensaciones que desprende su defensa, su gran virtud en la primera vuelta, son muy negativas.
No obstante, el entrenador, Jaume Ponsarnau, recalca que el GBC depende exclusivamente de sí mismo, un lujo para uno de los presupuestos más bajos de la categoría que ha tenido que afrontar además la escapada de su americano en el momento decisivo de la liga.