La evolución del incendio forestal de Arico es favorable, después de que durante la noche y madrugada de este lunes el dispositivo de extinción terrestre continuara trabajando en la vigilancia y control de puntos calientes, según ha informado el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad del 1-1-2 de Canarias.
A primera hora de este lunes se incorporarán de nuevo los medios aéreos para trabajar en la extinción de las llamas, que ya se han conseguido estabilizar, pero no controlar, manteniéndose en nivel 2 de alerta, de tal forma que la gestión seguirá siendo del Gobierno canario.
Hasta el momento, y según un nuevo cálculo con el satélite Copérnico, la superficie afectada se estima en unas 3.000 hectáreas en un perímetro que ha subido a 42 kilómetros, según los últimos datos aportados en la tarde del domingo por el consejero de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias, Julio Pérez.
Asimismo, durante este domingo ha comenzado la desescalada de los equipos operantes, por lo que se han replegado la UME de Gran Canaria y los equipos Presa y Bravo del Cabildo grancanario, continuando un centenar de profesionales trabajando por tierra, además de cuatro helicópteros y tres hidroaviones.