El alcalde de Santa Cruz de Tenerife se da por convencido: el tranvía debe pasar por la avenida de Los Majuelos. A pesar de que hasta ahora José Manuel Bermúdez (CC) había llegado a mostrar su preferencia por la avenida de Las Hespérides, dado el rechazo de los empresarios de La Gallega y El Sobradillo al trazado previsto por el Cabildo para ampliar la línea 2 desde Tíncer (en el distrito Suroeste del municipio), la realidad es que, a día de hoy, el regidor municipal ya no contempla otro recorrido diferente del elegido por el Gobierno insular.
“Lo que he dicho”, afirma Bermúdez a Tenerife Ahora, “siempre es que había que estudiar las dos opciones, pero una vez que están estudiadas, hay que decidirse por una, y desde luego el problema ya no está en CC, sino en los partidos que dicen una cosa en el Cabildo, como el PSOE, y otra cosa en el Ayuntamiento, o que no están a favor del trazado, como el PP, sin un estudio técnico riguroso que lo justifique”.
Por tanto, si por CC fuera, la obra se adjudicaría en cuanto el proyecto estuviera listo, y, de hecho, la empresa Metropolitano de Tenerife, propiedad del Cabildo, ha retomado este mes su tramitación, al sacar a información pública, en pleno agosto, y durante un mes, la evaluación de impacto ambiental, que se decanta por la avenida de Los Majuelos.
Pero, como reconoce Bermúdez, “en el Ayuntamiento no se dan las circunstancias políticas adecuadas que permitan sacar adelante este proyecto, porque, si tuviera que ir al pleno municipal, posiblemente no saldría, ya que no hay apoyo político suficiente”.
El mandatario santacrucero es consciente de que hay ciudadanos a favor y en contra del trazado que ha elegido el Cabildo, pero asegura que él asume que “en política hay que tomar decisiones” y “escoger la alternativa que técnicamente sea la mejor, porque además hay una obligación legal de hacerlo así”.
Para apoyar además esta convicción, evoca que, “cuando se inició el tranvía, estaba prácticamente toda la población en contra, y sin embargo, cuando se puso en marcha, me acuerdo perfectamente del éxito extraordinario que tuvo, y que ha mantenido hasta hoy, en número de usuarios, y ha mejorado el transporte público” en el área metropolitana.
Alonso no le ve sentido a otro trazado
Desde el Cabildo, su presidente, Carlos Alonso (CC), no alberga ya ninguna duda: “Claramente, el tranvía o va por la avenida de Los Majuelos o no va, y no es que lo diga yo, es que es la opción que técnicamente está justificada”.
En declaraciones a este periódico digital, el gobernante insular argumenta que el trazado por esta rambla “es lo que hace viable el proyecto, y lo que justifica” la extensión del metro ligero hasta el barrio de La Gallega desde la parada de Tíncer de la línea 2, la que tiene menos ocupación de las dos hoy existentes.
Alonso subraya que “no tiene sentido pasar el tranvía por la avenida de Las Hespérides, si por allí prácticamente no hay demanda”. De lo contrario, sostiene, se acometería una inversión cercana a los 40 millones de euros “que no cumpliría las expectativas”, como “tantos proyectos que en España se hicieron sin justificación y ahora son una carga para la sociedad que los financió, no solo por el coste de su ejecución sino por el de su mantenimiento”.
Comoquiera que el motivo del rechazo de los empresarios de la avenida de Los Majuelos al tranvía se debe a que esta obra suprimirá más de 500 aparcamientos en esa rambla, Alonso afirma que se mantendrá una dotación de aparcamientos y de que “se puede hablar con el Ayuntamiento para desarrollar otros adicionales” anexos a esta vía.
Un proyecto que parecía bloqueado
En 2016, cuando se inició la tramitación de la ampliación de la línea 2, este trazado suscitó tal división social (hubo manifestaciones en 2016 de hasta 2.000 personas para reclamar una alternativa por la avenida de Las Hespérides y surgió otra plataforma a favor de que pase por Los Majuelos) y política (el PP, socio de CC en el Ayuntamiento, forzó en 2016 que hubiera una solución consensuada con los vecinos, como se aprobó en un acuerdo en el pleno municipal, mientras Sí Se Puede apuesta por la guagua) que, en mayo de 2017, Bermúdez y Alonso (coincidieron en que esta inversión quedaría bloqueada hasta pasadas las elecciones de 2019. Se dio por hecho entonces que el proyecto no seguiría tramitándose, pero ahora se ha visto que no es así.
Metropolitano de Tenerife espera con esta línea una demanda de 800.000 viajeros al año (unas diez veces más que las cifras del actual recorrido entre La Cuesta y Tíncer, el de la línea 2 sin la ampliación).
Con la nueva configuración proyectada para la avenida, se mantendrá el bulevar central junto a sus jardineras, árboles y palmeras existentes, completándolos con un nuevo tramo de carril bici (desde la calle El Terrero hasta el cruce con la carretera de El Sobradillo, TF-272).
El ancho de la plataforma tranviaria será de tres metros cada una, y quedará una calzada de dos carriles por sentido para el resto del tráfico, pero con la eliminación de los actuales estacionamientos en línea y la reducción del ancho de las aceras.
Reacciones a favor y en contra
La reactivación del proyecto ha hecho que la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de La Gallega (Alagapyme), por boca de su presidente, José Manuel Afonso, haya advertido que unos 300 empresarios de La Gallega y El Sobradillo asentados en la rambla de Los Majuelos mantienen su firme rechazo a esta obra.
Esta patronal reclama una consulta popular sobre si es necesario el metro ligero y con qué trazado, y no se creen la “promesa” de habilitar aparcamientos en parcelas anexas, “porque con Taco se incumplió” en la línea 1. También exige una consulta de este tipo la plataforma favorable al proyecto, Vecinos por el Tranvía.
De “aberración” ha tachado el PP pasar el tranvía por la rambla de Los Majuelos, en palabras de la consejera del Cabildo y diputada nacional Ana Zurita, quien ha advertido de que los populares no cejarán en su empeño de que CC “dé marcha atrás” y pase el tranvía por Las Hespérides.
En una línea similar, el PSOE de Santa Cruz, a través del portavoz municipal, José Ángel Martín, ha exigido al Cabildo “no volver a generar un conflicto vecinal” en La Gallega y que deje paralizado el proyecto de ampliación de la línea 2, que atribuye a un “empecinamiento” de Alonso, al tiempo que solicita que se proteja a los comerciantes de la zona.
Para Podemos, es preferible una alternativa basada en guaguas eléctricas, que tendrían preferencia semafórica, paradas con paneles electrónicos informativos y marquesinas elevadas que permitan acceder a la guagua (de piso bajo) a nivel, según ha recordado su portavoz insular, Fernando Sabaté, quien además reprueba la “antidemocrática” decisión de sacar a información pública el proyecto en agosto.