El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, advirtió este lunes de que se le está acabando la paciencia por el retraso del Gobierno de Canarias en publicar el Plan General de Ordenación de la ciudad y mostró sus sospechas de que exista “una mano negra” en el ejecutivo.
“Llega un momento en que se plantea si hay una mano negra en el Gobierno de Canarias contra el Plan General, y no me refiero a un político”, dijo el alcalde. “Espero que el consejero de Política Territorial, Domingo Berriel, dé un puñetazo en la mesa y le diga a quien le tenga que decir, sea técnico o político, que haga su trabajo”, agregó.
Bermúdez recordó que la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (COTMAC) aprobó el Plan General en julio y desde entonces el Ayuntamiento, las empresas y los vecinos están esperando a que se publique para que entre en vigor.
“Me he fiado de la palabra” de políticos del Gobierno de Canarias, se lamentó Bermúdez, y el último plazo que le han dado para la publicación del Plan General ha sido el mes de abril. Si el plan está aprobado, que se publique y que se corrija lo que se tenga que corregir, insistió el alcalde, quien aseguró que se está mirando a Santa Cruz “con una lupa con la que no se mira al resto de municipios”.
Se quejó de que cada vez que el Gobierno de Canarias da un paso hay un error material de algo, así que el Ayuntamiento ya no sabe qué hacer, mientras la ciudad espera por su plan general, algo que “no se le mete en la cabeza” al ejecutivo.
En cuanto al proyecto de construcción del dique de San Andrés, el alcalde reclamó a la ministra de Fomento, Ana Pastor, que declare de urgencia la obra, porque si se tramita por el procedimiento ordinario llevará años, y se trata de una infraestructura para garantizar la seguridad de las personas.