Un grupo reducido de personas que participaron el miércoles pasado, día 15, en la celebración del octavo aniversario del movimiento 15M en la plaza de la Candelaria, en Santa Cruz de Tenerife, fueron “obligadas” por agentes de la Policía Local a borrar los eslóganes hechos con tizas en ese espacio público para así evitar ser sancionados.
Los activistas habían ideado esa forma de manifestarse para mostrar su orgullo y nostalgia por el 15M, para lo que con tizas de colores y en el suelo de la plaza colocaron mensajes alusivos al reseñado aniversario. La ocupación del espacio “no llegaba a los dos metros”, según un portavoz del grupo que convocó la acción.
Al poco tiempo de iniciar esa actividad reivindicativa, en la tarde del miércoles 15 de este mes, cuatro agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife se acercaron a la concentración y advirtieron al grupo de que debían borrar dichos mensajes o podían ser multados con 600 euros por vandalismo, señalaron los concentrados en la plaza.
“¿Vandalismo por una pintada con tiza?”, comentó uno de los presentes en el acto del miércoles pasado. Las personas allí reunidas replicaron a la policía que les parecía exagerada la reacción de la autoridad ante una simple escritura en el suelo con un material que se borra tan fácilmente.
Ante esos hechos, los policías informaron de que el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife no permite pintar la vía pública aunque esto se haga con tiza. Ante la presencia policial y la insistencia de los agentes, las personas concentradas en la plaza se vieron obligadas a eliminar las marcas realizadas con tiza debido a la citada conmemoración del movimiento 15M. Solo en ese momento, con el borrado de los mensajes, los agentes renunciaron a iniciar el proceso sancionador previsto en estos casos.
Preguntado el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife por lo ocurrido el miércoles pasado en la plaza de la Candelaria, en esa concentración para celebrar el octavo aniversario del movimiento 15M, fuentes del Consistorio no han dado mayor importancia a lo ocurrido y aseguraron que los policías cumplieron con su trabajo al informar de las consecuencias a modo de sanción que tienen esos “comportamientos incívicos” en espacios públicos. “Vandalismo es cualquier acción que atente contra el mobiliario urbano, por muy insignificante que pueda parecer a la persona que lo está realizando”, comentaron desde el Ayuntamiento.
Al margen de la naturaleza del acto de protesta, las mismas fuentes consideraron que la obligación de la Policía Local es velar por la conservación de la vía pública, así como informar a las personas sobre las consecuencias del incumplimiento de las normas establecidas en el municipio.