Responsables del Teleférico del Teide han afirmado este viernes que “es pronto” para determinar las causas que provocaron el fallo de las dos cabinas que mantuvo retenidas entre el miércoles y el jueves a 238 personas en varios puntos del volcán. Estas mismas fuentes, en declaraciones a EFE, calculan que “al menos hasta el martes” no se sabrán los motivos que pudieron originar dicha avería.
Asimismo la empresa ha añadido en una nota de prensa que también es pronto para calcular “el plazo de apertura al público del teleférico” y que “siempre se llevará a cabo bajo condiciones de máxima seguridad”.
Una vez concluidas este jueves las labores de rescate se ha comenzado a trabajar en las operaciones para recuperar las cabinas bloqueadas en los cables y traerlas de vuelta a las estaciones.
Técnicos especialistas del fabricante suizo del teleférico, Garaventa, serán los encargados de realizar un informe conjunto sobre las causas de la avería. En estos momentos se están revisando y se repararán, si fuera necesario, los sistemas implicados en la avería, para de esta manera certificar que la instalación quede en perfectas condiciones para la apertura al público.
Paralelamente, Teleférico ha solicitado la presencia de un técnico de la empresa fabricante de los cables del teleférico, Fatzer, también de origen suizo, para que realice una revisión completa de los cables y certificar su estado adecuado para el correcto funcionamiento de la instalación.
En un primer momento, desde Teleférico se descartó que el bloqueo de las cabina se debiera a una acción involuntaria desde dentro de las mismas
Según ha informado el Cabildo de Tenerife, de las 238 personas, 77 de ellas viajaban en las dos cabinas y 93 tuvieron que pasar la noche repartidos entre la estación superior, el refugio de la torre 2 y el de Altavista.