El presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, ha confesado en los micrófonos de la Cadena Cope que el proyecto de construcción de un tren al sur de la isla significará el gasto de “un dineral”, que “no toca hacer en este mandato, las perras que tenemos las necesitamos para otra cosa”. El socialista estima que se necesitará una inversión de al menos 2.500 millones de euros y que “no vendrá todo de Europa”. “Desde aquí tendremos que aportar dinero a esta infraestructura tan potente”, comentó.
Por otro lado, Martín puso en duda de la capacidad del tren para resolver los problemas de movilidad en la isla. No obstante, confirmó que “se ha dejado en manos de los especialistas, para que sean ellos los que digan, con un estudio de movilidad, qué es lo que hay que hacer”. Durante la entrevista radiofónica el político apuntó también que no se había realizado un estudio así nunca antes: “Por eso, lo hemos encargado y tendremos los resultados este año”, añadió y prometió entonces tomar una decisión en base a las conclusiones que se extraigan del informe.
En lo que se refiere a las diferencias de criterios, Pedro Martín señaló que tanto el Partido Socialista como Sí Podemos Canarias, “llegaron al acuerdo de dejar este proyecto aparcado, a la espera de los resultados del estudio, para tomar una decisión”.
Cabe recordar que el vicepresidente del Cabildo de Tenerife, y consejero del Área de Carreteras, Movilidad, Innovación y Cultura, Enrique Arriaga (Ciudadanos), retiró la semana pasada una moción que había presentado para debatir en el pleno de la corporación sobre el impulso al proyecto de construcción del tren al sur de la isla. Sin embargo, ante la “falta de consenso”, Arriaga optó por retirarla.
El PSOE, que ostenta la presidencia en el Cabildo, apoyó la moción, no así Sí Podemos Canarias, que, aunque no forma parte del Gobierno, sustenta con sus votos el pacto entre socialistas y Ciudadanos. María José Belda, consejera de Sí Podemos, había señalado previamente que apoyar este “macroproyecto ultradesarrollista que implica destruir nuestro frágil territorio, con kilómetros de expropiaciones, obras y molestias durante años, sin apostar previamente por mejorar el servicio de guaguas y otras medidas no invasivas” era traspasar una de las “líneas rojas” del acuerdo de Gobierno alcanzado para que prosperara la moción de censura que desbancó a Coalición Canaria de la corporación. Si esta salía adelante este viernes y se impulsaba el plan, el pacto se rompería.
Por su parte, el PP y de Coalición Canaria mostraron su respaldo a la iniciativa y acusaron a Sí Podemos de “amenazar” al Cabildo, a lo que el partido ha respondido que lo que ha hecho ha sido “poner en valor los acuerdos programáticos” firmados con PSOE y Cs.
Arriaga expresó que, al tratarse de un proyecto tan importante para la isla (algo en lo que han coincidido todos los grupos), era de esperar que este contase con el apoyo total del pleno, y que, como no ha sido así, era mejor retirarla. Además, el PSOE matizó que, aunque apoya el proyecto, “no es una prioridad” en este momento, en plena crisis derivada de la pandemia de coronavirus.