La Federación de Servicios de CCOO en Canarias ha denunciado este viernes que un funcionario en el Centro Penitenciario de Tenerife sufrió ayer lesiones tras ser golpeado con un palo de escoba por parte de un recluso, lo que supone una nueva agresión tras la registrada el 23 de noviembre.
La agresión se produjo en el módulo 2, de internos inadaptados, a cargo de un recluso con trastorno mental y problemas de adicciones que realizaba una reclamación “extemporánea”, según ha indicado CCOO este viernes en un comunicado. El jefe de servicios, que se personó en el lugar de los hechos, sufrió otro ataque con una cuchilla que no tuvo consecuencias, ha agregado el sindicato.
Para la organización sindical, estos hechos vuelven a poner en evidencia “las graves carencias” de las instituciones penitenciarias y de este centro en particular debido a múltiples causas, como son la superpoblación del centro con más de 200 internos sobre su capacidad, lo que impide una óptima reclasificación interior.
A esto se añade la paralización de las derivaciones a otros centros penitenciarios de población interna sin vínculos en la isla o con su destino, ya aprobado por el centro directivo, así como la falta de personal y la ausencia de unidad psiquiátrica o especialista permanente en el centro penitenciario, a pesar de su previsión legal. Ello conlleva que los enfermos mentales “acaben desperdigados” por los módulos de la prisión o, en el mejor de los casos, en las enfermerías.
El sindicato también alude a la falta de formación específica del personal penitenciario para el abordaje de este tipo de internos y de recursos y protocolos suficientes, así como “la inexistente” aplicación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Por ello FSC-CCOO reitera la necesidad de tomar medidas urgentes como el redimensionamiento de las plantillas, la creación de programas de formación para los funcionarios y la derogación o modificación del Protocolo Específico de Actuación Frente a las Agresiones para que, de una manera integral que incluya la prevención de riesgos y seguridad, se aborde el crecimiento exponencial de las agresiones en nuestro ámbito. “No menos importante es facilitar la atención legal y psicológica a los funcionarios tras una agresión, ya sea física o verbal”, añade CCOO.