La Fiscalía pide 15 años de prisión para un hombre acusado de violar a una menor de edad, a la que habría transmitido una enfermedad venérea, y al que considera autor de un delito continuado de abuso sexual y otro de lesiones.
El juicio comenzará la semana próxima en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife y la Fiscalía también reclama al acusado que abone 39.000 euros, de los que 30.000 corresponden a una indemnización por daños morales y el resto a gastos sanitarios que debieron afrontar los padres de la víctima.
La joven presenta un funcionamiento intelectual límite, por lo que tiene una mayor docilidad, sugestionabilidad y menor oposición para cumplir las directrices de un adulto y, en definitiva, un limitado juicio crítico, lo que habría sido aprovechado por el hombre para consumar los abusos.
El acusado residía en la planta alta de una casa situada en La Orotava con su pareja sentimental y los suegros, mientras que en la baja estaba la menor con su padre, que era hermano de la novia, con lo cual el acusado sería tío político suyo.
El hombre contrajo matrimonio y se trasladó a otra residencia pero siguió frecuentando la de sus suegros, de manera que en al menos dos ocasiones aprovechó esta circunstancia para quedarse a solas con la menor y violarla.
Los hechos se consumaron cuando el procesado sabía que era portador de una enfermedad sexual que transmitió a la menor, por lo que requirió que fuera tratada durante 199 días en los que no pudo llevar a cabo una vida normal.
En su momento se impuso una medida cautelar de alejamiento de doscientos metros, que ahora se pide mantener durante diez años, otros seis de libertad vigilada, la obligación de participar en un programa de educación sexual y no poder ejercer trabajo que implique relación con menores durante quince años.
Dado que los hechos tuvieron lugar antes de la entrada en vigor de la ley orgánica que regula las agresiones sexuales en octubre de 2023, la acusación se centra en un abuso y en principio tampoco se podría aplicar la modificación por no ser más favorable al reo.