La Audiencia de Las Palmas ha condenado este martes a dos años de cárcel a los 6 jóvenes que dieron una brutal paliza a otro en 2010 durante la celebración de una boda en Gran Canaria, al modificar el fiscal sus conclusiones y calificar los hechos como un delito de lesiones y no de intento de homicidio.
El tribunal ha emitido la sentencia después de que los seis procesados se conformaran con la nueva calificación del fiscal Javier Ródenas y fuera aceptada por el abogado de la acusación particular que representaba a la víctima, Félix V.L., quien además será indemnizado con 30.000 euros debido a las lesiones que sufrió.
El fiscal ha considerado en su calificación la agravante de superioridad y tres atenuantes motivadas por la ingesta de alcohol de los acusados, por haber reconocido los hechos y consignado la cantidad de 6.000 euros en concepto de reparación del daño causado y por las dilaciones indebidas no imputables a los procesados que paralizaron el procedimiento 2 años y 6 meses.
La sentencia dictada por el tribunal es firme, ya que las partes renunciaron a recurrirla.
Los seis acusados que protagonizaron la pelea ocurrida a las tres de la madrugada del 3 de octubre de 2010, en el complejo Camino Viejo de Jinámar, son Nahun Jacobo C.M., Jesús M.R. y su hermano Daniel, Jonatan José S.J. y Francisco Javier C.M. y su hermano Emilio Ruyman.
Este último acusado fue quien inició una discusión con la víctima que degeneró en un puñetazo y empujón que lo tiró al suelo, donde fue brutalmente golpeado por el resto de los cinco procesados.
Los múltiples golpes que recibió la víctima le ocasionaron rotura de páncreas con sangrado, pancreatitis postraumática y laceraciones en el riñón izquierdo, por lo que precisó de ingreso hospitalario y de intervención quirúrgica urgente, si bien después sufrió complicaciones que obligaron a ser ingresado de nuevo en un centro hospitalario.
Como secuela de la agresión sufrida, la víctima tiene una cicatriz horizontal en el abdomen de 23 centímetros de longitud y dos pequeñas por el drenaje ligeramente dolorosas, según señala el escrito del fiscal.